Desde hace 7 años se celebra, en la ciudad de Valladolid, un Campeonato Mundial de Tapas, un concurso para elegir al chef que elabora la tapa más llamativa, más original y adecuada a la Nueva Gastronomía del siglo XXI. El Campeonato, dirigido por Ángel Moretón, es un lugar de encuentro, un evento cultural y recreativo que ha ido evolucionando hasta convertirse en una reunión espectacular con 16 países de diferentes continentes.
He tenido la suerte de presidir, durante años, el Campeonato Mundial y el Concurso Nacional de Pinchos y Tapas de Valladolid, que se celebran conjuntamente. Este año, que acudí como invitado especial, me hicieron un homenaje, por mi trayectoria y por el apoyo de todos estos años al concurso, por lo que quiero expresar mi agradecimiento a la organización.
También quiero hacer un elogio a la “ciudad de la luz” que, estando aparentemente alejada de los lugares más típicos de tapas (como pueden ser Sevilla, Barcelona o Bilbao), ha tenido la sensibilidad de entender que las tapas constituyen una forma original y muy española de plantear la comida. Una forma de comer que da más importancia, quizás, a la posibilidad de conversar, de mantener relaciones personales y de crear convivencia y amistad.
En Andalucía, las tapas consisten en una copa acompañada de lo que, en ocasiones, se llama, incluso, “empapante”. En cambio, en Bilbao es una comida, un pintxo, que se acompaña de una bebida. En Madrid, es una síntesis de las dos fórmulas, es decir, se elige tanto la comida como la bebida, lo que constituye el aperitivo.
VII Campeonato Mundial de Tapas
Pues bien, en Valladolid se rinde homenaje a la palabra “tapa”, que es la más internacional. El jurado del Campeonato Mundial lo presidió Pía Salazar, que ha sido nombrada Mejor Chef Pastelero del mundo por The World’s 50 BestRestaurants 2023; mientras que el Concurso Nacional estuvo presidido por Iván Cerdeño.
Entre los 16 finalistas, 6 eran de Iberoamérica, 4de Asia, 3 de Europa, 1 de África, 1 de América y 1 de Oceanía. Quiero destacar, entre otros, la presencia de México, a través del chef José Francisco Garay, que ganó el I Concurso Nacional de Pinchos y Tapas de Méxicocelebrado, en septiembre, en la ciudad de Querétaro.
Es admirable que todas estas personas se desplazaran desde sus países (en general, con ayudantes) y que, en un espacio relativamente reducido, prepararan, para dieciséis personas,una muestra de su capacidad para encontrar productos de calidad y originales, combinándolosde manera que fueran una auténtica satisfacción para los cinco sentidos.
La única observación que yo haría es que, en general, las tapas eran poco tapas, es decir, eradifícil cogerlas con la mano y comerlas de un bocado. Pero, desde el punto de vista de originalidad y creatividad, podrían haber estado en un concurso organizado por Ferran Adrià.
Ganadores 2023
Entre los ganadores del VII Campeonato Mundial de Tapas, Suecia se llevó el primer puesto, destacando la propuesta del chef Noel Moglia, del restaurante Julita Wärdshus. Su tapa, titulada “My roots and knowledge”, es un pan de patata frito relleno de crema de queso, cubierto con cebolla caramelizada glaseada con miel, encaje de miel, patata crujiente, chalota crujiente y tomillo limón.
El segundo puesto fue para España. El chef Ariel Munguia, del restaurante homónimo, preparó su “Cochino bocado”, un cochinillo marinado a baja temperatura, hierbas aromáticas y lechuga licuada.
El tercer puesto se lo llevó Baréin, con la chef Soni Kumari, del restaurante Upcoming Raffles Al Areen Palace. Su tapa, “La flor del mar”, está elaborada con cangrejo de barro, puré de manzana cítrica, lima, pomelo y caviar de Avruga.
Quiero destacar, muy especialmente, la belleza, la presentación, la estética inmejorable de las tapas.
Tapa del concursante mexicano José Francisco Garay, ganador del I Concurso Nacional de Pinchos y Tapas de México en Querétaro.
La organización del evento
Quiero felicitar a Ángel Moretón y a todo su equipo. Y a Goyo González, que presenta el evento desde hace años, un gran profesional que mantiene el interés del público durante la hora y media que dura el evento.
También, al Ayuntamiento de Valladolid, muy especialmente a su concejala de Turismo, Eventos y Marca Ciudad, Blanca Jiménez, y a su gerente, Juan Manuel Guimeráns.
Espero que este Campeonato Mundial de Tapas sirva para impulsar, por fin, la declaración de las tapas como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la Unesco. Un trámite que iniciamos en el último Gobierno de Mariano Rajoy, con Íñigo Méndez de Vigo como ministro de Cultura, y que, por la razón que sea, no ha tenido la debida continuidad.
