Comúnmente asociado a la comida chatarra, y poco saludable, la fritura, también tiene su día mundial. Cada 2 de diciembre, el aceite y el sartén son los grandes protagonistas.
Con respecto al origen de la fecha, se estima que proviene del "Fritters Day", un día nacional de Estados Unidos, dedicado a la fritura de verduras, frutas o carne rebozadas.
Hoy te presentamos dos recetas de alimentos que habitualmente no se consumen fritos, pero que pueden convertirse en frituras:
Pasta italiana, cualquier variedad que por lo general se consume hervida y con salsa, puede freírse en aceite y pasarse por una mezcla de harina y huevo para que quede crujiente.
Ingredientes:
- 250 gr pasta fresca rellena de quesos (podemos elegir el sabor que más nos guste)
- 50 gr de pan rallado
- 25 gr de queso curado
- 1 huevo
- 3 o 4 nueces
- Pimienta negra
- Sal
- Aceite para freir
- Empezar rallando las nueces
- Mezclar las nueces ralladas con el pan rallado
- Rallar el queso y agregarlo junto con la pimienta negra y mezclar todo.
- Batir el huevo con un poco de sal y procedemos a empanar la pasta. En este caso he usado pasta fresca y eso hace que no sea necesario hervirla para usarla como sería su usamos pasta seca.
- Empanamos la pasta, pasando por el huevo batido y después por el pan rallado. Dejamos en un plato y vamos haciendo toda la pasta.
- Finalmente, en una sartén con abundante aceite caliente a fuego medio-alto freimos la pasta.
- Cuando esté dorada retiramos del aceite y depositamos en un plato con un papel de cocina para que absorva el exceso de aceite.
- Servimos acompañada de nuestra salsa favorita.
Helado frito:
Ingredientes:
Elaboración:
Elegir un helado (puedes hacerlo de forma artesanal)
Servir media taza de la leche en un recipiente.
Luego toma una bola de helado y coloca una rebanada de pan por arriba y otra por abajo, como si quisieras hacer un sándwich de helado.
Con mucha delicadeza ve envolviendo la bola de helado en el pan, hasta formar una bola de mayor tamaño con ambos ingredientes. Al ser suave, el pan de molde permite que lo manipules de este modo. Luego deberás sellar la unión que queda entre ambas rebanadas de pan con un poco de leche, lo mejor es usar un pincel de cocina para ello.
Una vez realizada la bola de helado, envuélvela en papel aluminio y llévala al congelador por 24 horas.
Luego del tiempo de congelación, deberás preparar la mezcla para rebozar el helado frito. En un recipiente junta la taza de harina tamizada, la taza de leche y el huevo. Bate hasta conseguir una mezcla libre de grumos.
En paralelo agrega a una sartén antiadherente o a una olla alta una buena cantidad de aceite para freír y pon a calentar a temperatura alta.
Saca las bolas de helado del congelador.
Reboza en la mezcla de harina, leche y huevo y pon a freír cuando el aceite esté muy caliente. La bola de helado demorará cerca de dos minutos en obtener un colo dorado, cuando lo haya conseguido retira rápidamente del fuego y coloca en un papel absorbente.