HIP 2024: Alejandra Rivas presenta el caso de éxito de Rocambolesc

Creado:
Autor:
Credito
Redacción Excelencias Gourmet
Alejandra Rivas presenta el caso de éxito de Rocambolesc

En la primera edición de HIP 2024, en el espacio de New Food Trends, dentro del Kitchen Lab, Belén Parra, cofundadora de Gastronomistas, fue la moderadora de un encuentro dulce y la presentación de un caso de éxito.

"Cuando la heladería trasciende a la mera degustación, se rige por la creatividad y se recrea con la interacción (y reacción) del cliente", así se anunciaba la entrada de la ponente Alejandra Rivas, co-fundadora y co-propietaria de Rocambolesc. 

 Al inicio del encuentro, se presentó un video explicativo donde se resumía la esencia del Rocambolesc "somos una factoría de sabores extraordinarios con forma de dulces, chocolates y extraños helados creados por Ale Rivas y Jordi Roca. Un lugar mágico donde puedes encontrar Oompa Loompas, unicornios de galleta y chocolate, helados calientes o el mismísimo Darth Vader convertido en polo".

"Rocambolesc nace con la idea de llevar los postres del Celler a pie de calle", comenzaba diciendo Alejandra Rivas. "Al inicio queríamos hacer un carrito ambulante que recorriera las calles de Girona, pero como la normativa en estos casos es complicada, al final decidimos agarrar un local y ya que teníamos un local entendimos que debíamos darle la vuelta. La gente se esperaba que fuera a ser la pastelería de Jordi, pero los dos somos amantes de los helados y pensamos que podíamos darle la vuelta y que estos helados fueran postres".

Más allá del producto, el local ha marcado un punto de inflexión, no es una heladería como la conocemos, es único. Hay varios Rocambolesc, en Girona, en La Rambla, en Madrid,..., enfatizaba Belén.

"Lo que buscamos es que el cliente viva una experiencia 360 grados. Teníamos algo claro: que cuando fueran a la heladería vivieran en un mundo de fantasía. Inicialmente pensamos que tendríamos un público mayoritario de niños y hoy tenemos muchos de la tercera. Ellos eran los que venían con sus nietos a la heladería. Hemos creado un ritual súper bonito en la familia", precisaba Alejandra.

Entre las innovaciones estuvo también la maquinaria. "La máquina soft, apostamos por ella, y estaba muy mal concebida y pensamos cómo podíamos sacarle máximo provecho. Al no estar el helado tan frío, se pueden notar mejor aromas y sabores. En estos la textura también ayuda al no ser tan dura como otros de vitrina. Además del soft, tenemos formatos para restauración de medio litro y para tiendas, para llevar a casa".   

"En cuanto a los toppings, nos encanta que cada uno de los clientes vaya y se prepare su propia versión, se convierte en el creador de su propio helado. Eso nos enriquece mucho porque nos permite pensar en opciones que no habíamos valorado antes y con las particularidades de cada público. En Madrid, por ejemplo, se consume mucho el de sorbete de coco y violeta; en Barcelona es el yogurt y en Girona el de manzana al horno".

Credito
Redacción Excelencias Gourmet