Aunque aún alejado de los niveles prepandemia, el consumo de vino en España ha mostrado una demanda mayor en el periodo interanual a mayo de 2024 respecto al año 2022. El Observatorio Español del Mercado del Vino (OeMv) para la Interprofesional del Vino de España (OIVE) registró un consumo de 9,83 millones de hectolitros que suponen un 1,4% más que los 10 millones alcanzados hace dos años en octubre.
Las estadísticas de febrero de 2020 constituyen, sin embargo, el récord histórico hasta el momento, cuando se llegó a 11, 09 millones de hectolitros, mientras un año después experimentó una de sus cifras más bajas del último lustro, con 8,8 millones debido a la COVID-19.
El informe también destaca una mejora en la tendencia del consumo de vino en el canal de Alimentación. Solo entre abril y mayo de 2024, este canal ha percibido un crecimiento del 4% en valor, lo que en números serían 1.763 millones de euros, aunque en volumen ha experimentado una ligera caída del 0,1%. Estos datos de Nielsen IQ demuestran también una recuperación en este sentido, en tanto es el mejor desde agosto-septiembre de 2021.
No obstante, el consumo de vino en Hostelería no ha corrido con la misma suerte. Desde su caída en pandemia se le ha resistido su recuperación, con tendencia incluso a la disminución, con un 3,1% en volumen, 2,09 millones de hectolitros, y un 1,6% en valor, que representa 1.321 millones de euros.
Según la Organización Internacional de la Viña y el Vino (OIV) este comportamiento es mundial, pues en 2023 se registró un descenso del 2,6% respecto a las cifras de 2022, con 221 millones de hectolitros.
Por el momento, esta ligera mejoría denota estabilidad en el mercado del vino en España.
