Treinta y tres playas y 100 restaurantes tiene el Mejor Destino Culinario del Caribe 2024. Tan discreta en tamaño y sectores industriales o deportivos, Anguila a veces cuesta ubicar en el mapa. Y es que este conjunto de islas de las Antillas Menores supone un destino turístico por excelencia.
Su privacidad, lujo hotelero y gastronomía de alto nivel lo consolida cada vez más en el top de los paraísos caribeños favoritos de grandes empresarios y personalidades internacionales. No en vano fue la elección este año de los World Travel Awards.
Pero más allá del paisaje visual de su playas vírgenes, Anguila conquista por su fusión culinaria entre la cocina británica, francesa, africana, españolas, francesas e incluso indígena arawak. En buena medida, la oferta de sus restaurantes marca la diferencia respecto a otros destinos del Caribe. De ahí que algunos la bauticen como un paraíso para los amantes de la comida.
Sus platos tradicionales huelen y saben a mar. Por eso tienen en común los frutos y carnes que provienen de él, en especial sus langostas,meros, pargos, y zumos de frutas tropicales como el mango, la piña, el coco, el limón. En materia de elaboración se distingue por sazonados con abundantes especias como el jengibre y la pimienta, y el estilo barbacoa.
Un menú típico de Anguila bien pudiera estar compuesto por pargo a la barbacoa, acompañado por una ensalada, o un guiso fresco. Otras combinaciones igual de ricas y tradicionales son los platos de gambas o cabra, la cual se considera carne autóctona.
Los desayunos suelen llevar también un toque de marisco, uno de los preferidos es el pescado de sal rallado con pimientos y cebollas. Mientras, entre los principales destacan los guisantes de paloma con arroz condimentado.
El acompañante por excelencia son los pasteles de Johnny, una suerte de bolas de masa hechas con harina de maíz, crujientes pero suaves en el interior y ligeramente dulces. Podría decirse que esta es de las elaboraciones más versátiles de la cocina anguilense, en tanto, puede ser por sí solo un refrigerio o desayuno también, rellenos de queso o jamón.
Resulta bastante popular su versión del pollo jerk, originario de Jamaica o la sopa de callaloo, a base de hojas de callaloo, leche de coco, okra y una variedad de verduras y hierbas locales. En ocasiones, se le incluye carne de cangrejo o bacalao salado, agregando profundidad y riqueza al sabor.
( Foto tomada del portal de turismo de Anguila)
La huella francesa se hace notar en sus platos de foie gras y los ceviches de caracol, que a menudo se acompaña de aguacate o plátano, como un aperitivo perfecto.
Entre los postres, el más clásico supone el budín de pan, que lleva leche, pan, margarina, limón, arándanos y azúcar moreno.
La mayoría de estas recetas se pueden degustar en restaurantes de comida local como Andys, Gwens Reggae, Lucys, Tastys, Straw Hat Restaurant, Blanchard’s Restaurant, Cap Shack, Celeste by Malliouhana, cuya variedad de estilos, decoración y menús de autor llevan al paladar la esencia de estas islas. Sin olvidar sus festivales culinarios, un atractivo turístico y gourmet.
Después de esto no faltarán ganas de probar algún bocado del abanico de sabores que esconde uno de los archipiélagos más pequeños del Caribe.
