Mezcla entre desayuno y almuerzo, eso es el brunch y a pesar de haber surgido hace 2 siglos, pareciera que conserva la misma frescura de sus inicios. Y es que este término anglosajón lleva implícita una naturaleza divertida que ha conquistado las mesas de cualquier día de la semana. Lo que comenzó siendo una experiencia gastronómica de domingos en Reino Unido, relajada y sin prisas, ha derivado en una opción muy socorrida desde cualquier parte del mundo, lo mismo para sacar de un apuro que para combatir resacas después de las noches de fiesta.
Ese plato "alegre, sociable e incitador" con el que su creador Guy Beringer bautizara el término hoy es parte imprescindible de cafetería, restaurantes y, por supuesto, de los hogares. Como la creatividad no tiene límites, ni los brunchs tampoco, aquí te compartimos 5 ideas para que pongas en marcha en casa.
1. Tostadas gourmet
Las tostadas son un clásico del brunch y se pueden personalizar de muchas formas. Si eres de sabores salados, puedes prepararlas con aguacate, huevo poché o salmón ahumado con queso crema. Los del team dulce probablemente disfrutan más esta opción: tostadas con mantequilla de almendra y frutas frescas como fresas o plátanos.
2. Tortitas al estilo americano
Las tortitas o pancakes son otro indispensable en un brunch. Válidas también tanto para amantes del dulce como del salado. Puedes servirlas con sirope de arce, frutas frescas, nata montada o incluso acompañarlas de bacon crujiente para un toque más salado.
3. Frutas, zumos y smoothies
Entre las opciones de brunch las frutas y verduras frescas no pueden faltar. En este caso la propuesta viene con yogur y granola, una opción ligera pero deliciosa, o a modo de smoothies, como el clásico de plátano, espinacas y mango.
4. Huevos benedict
Para resistir al día nada mejor que el huevo, este superalimento versátil que es justo el protagonista de esta receta. La idea precisa escalfar los huevos y servirlos sobre muffins ingleses con una loncha de jamón o salmón, todo cubierto con una cremosa salsa holandesa.
5. Cócteles y bebidas
Para quienes busquen un estilo de brunch más festivo, funcionan muy bien los cócteles clásicos como la Mimosa (una mezcla de cava y zumo de naranja) o el Bellini (zumo de melocotón y vino blanco).
