Algunos habanos cuya potencia crece con el añejamiento

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Juan López nos deslumbra con su Selección No. 1 (Nombre de Galera: Corona Gorda. Formato; 143 x 18,26 mm. Cepo 46. Peso 10,9 g). Fue considerado el “Habano del año 1998” por España y Francia.

Selección No. 1 responde a una fortaleza marcaria de media a fuerte. Su fumada, como puro añejado, impresiona por su intensa potencia fortalecida en los tonos a madera fresca en nariz y boca, disminuyendo su terrosidad y destacando notas claras de frutos secos.

Saint Luis Rey despunta un habano con estilo y carisma, su Serie A (Nombre de Galera: Corona Gorda. Formato; 143 x 18,26 mm. Cepo 46. Peso 10,9 g).

Serie A responde a una fortaleza marcaria fuerte. En sus primeros años su potencia es intensa, pero posteriormente crece sustancialmente y se clarifica con aromas bien definidos. La potencia de su tercer tercio de fumada incita a no abandonarlo.

Cohíba Línea Clásica presenta su Lanceros un habano para expertos fumadores (Nombre de Galera: Laguito No. 1. Formato; 192 x 15,08 mm. Cepo 38. Peso 10,29 g).

Lanceros se inscribe con fortaleza de media a fuerte. En sus primeros años su potencia está marcada por su cremosidad y su carácter herbáceo, con una mezcla compleja de tonos a tabaco fuerte y madera. A mayor cantidad de años su potencia es extraordinaria, y en cada tercio de fumada es capaz de entregar gustos y aromas diferentes en nariz y paladar. Es tal la intensidad de su potencia que podría soportar muchísimo más tiempo y mejorar aún más.

Cohíba sin lugar a dudas presentará una gran revelación con su Gran Reserva del Siglo VI, pues por lo delicado e intenso de su diseño, este habano será un candidato digno para alabar la potencia de esta marca insignia del vitolario cubano.

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