El Habano ideal

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Ignacio Rodríguez
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Un buen Habano es un regalo para el tacto, la vista, el olfato y el paladar; una mezcla de sensaciones que debe disfrutarse con calma y suavemente, de acuerdo al gusto de cada persona, pero… ¿cómo escoger el perfecto para uno?

Al llegar a una tienda de tabaco o tener que seleccionar entre las propuestas que nos hace un sommelier, la variedad de marcas y vitolas que existen de habanos puede causarnos confusión. No se puede uno guiar solo por presentaciones vistosas o marcas famosas, aunque estas últimas tengan algunas de las mejores propuestas. Cada persona tiene un gusto particular en materia de habanos, y encontrar el que más se nos ajusta puede ser una experiencia fascinante, así que no está nunca de más experimentar.

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Según los expertos, para encontrar el Habano Perfecto para uno hay dos vitolas o tamaños de tabaco ideales, la Corona (142mm de largo x 16,67mm de diámetro, cepo 42) y la Mareva (129 mm de largo x 16,67 mm de diámetro, cepo 42) Ambas son recomendables para definir nuestro gusto, por estar presentes en prácticamente todas las marcas de Habanos, con lo cual podemos comenzar nuestra experimentación, siempre teniendo en cuenta algunas preguntas básicas...

¿Cómo elegir el Habano ideal?

¿Suave o fuerte?

La fortaleza de un habano varía de acuerdo a la marca, pero también pueden influir otros factores como el tiempo de añejamiento o el maridaje. Si fuma más de uno en el día, deben ser de fortalezas similares. Nunca fume un puro suave después de uno fuerte, pues no lo disfrutará.

¿Largo o corto?

Un habano se intensifica a medida que se fuma, y es casi siempre en el segundo tercio donde se revelan sus cualidades. Para no dejarlo a medias, seleccione el largo del habano en dependencia del tiempo que tenga para fumarlo.

¿Grueso o fino?

Existe la creencia generalizada que los habanos más gruesos arden menos, cuando en realidad es al revés y además tienden a ofrecer sabores más intensos. Los de calibre largo, en cambio, no contienen hojas de tabaco ligero en la ligada para favorecer la combustión, por lo cual generalmente su contenido de nicotina es más bajo.

¿Oscuro o claro?

Muchos piensan que mientras más oscuro sea el tabaco es más fuerte, pero no es así. Es la ligada interior la que da fortaleza al habano. La capa por lo general otorga aroma y sabor, siendo las más oscuras casi siempre más dulzonas y aromáticas.

¿Añejo o fresco?

Un habano conservado en condiciones ideales de temperatura y humedad puede durar mucho tiempo. Este añejamiento adicional puede mejorar mucho su sabor y aroma, haciendo de su fumada una experiencia única.
 
Recuerde… Aunque cuando escoja un habano por lo general no podrá tocarlo con sus manos para evitar dañarlo, o si lo hace procure sea con guantes, hay algunos detalles que le dirán si su elección es la correcta. Por ejemplo, debe tener un aroma que le guste, ligeramente a cedro, por efecto del almacenamiento. La capa debe ser de un color uniforme, sin rasgados o protuberancias excesivas. Verifique que esté anillado correctamente y no tenga roturas. Si puede palparlo, no debe estar excesivamente flácido pero tampoco demasiado duro. En ese caso, casi siempre la capa se rasga al menor contacto.
 
"Encontrar el habano que más se adapta a nuestro gusto puede ser una aventura olfativa y gustativa fascinante".
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Ignacio Rodríguez

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