Seguramente si lee la palabra "alga" le vendrá a la mente una imagen del fondo del mar. Pues debe saber también que las algas o plantas marinas son uno de los platos saludables más demandados en los últimos años, por la cantidad de nutrientes y energía que aporta.
El contenido en minerales de las algas es alto. No obstante, no todas las algas son iguales porque dependen de la profundidad en la que crecen y misma exposición a los rayos del sol. Aun así, se puede decir que, de manera general, las algas constituyen buenos antioxidantes y una excelente fuente de fibras.
Entre las algas comestibles destacan la conocida como dulce, kombu, nori, wakame y el agar agar. Todas aportan diferentes componentes nutritivos a tu alimentación.
Algunos beneficios de comer algas
Como veníamos diciendo, las algas marinas tienen una gran cantidad de nutrientes. Contienen vitaminas A, C, D, E, B1, B2, fósforo, potasio, hierro, yodo, fibra, sodio y otras pequeñas cantidades de proteínas vegetales que son muy fáciles de asimilar para el organismo.
Le puede interesar: Últimas tendencias en proteína vegetal presentes en HIP 2020
La densidad de calcio que posee también hace de esta planta marina un alimento especial. De hecho, las algas se consideran un superalimento debido a la cantidad de calcio, que supera hasta 10 veces el nivel de este mineral en la leche.
Por otro lado, entre las propiedades curativas de las algas se puede decir que su consumo regular y sin exceso puede estabilizar los niveles de azúcar en sangre y limpiar el sistema digestivo. Además, sirve para evitar las enfermedades virales y reducir las inflamaciones, fortaleciendo así el sistema inmune.
Un punto a favor de las algas marinas es que son ideales para evitar el sobrepeso y la obesidad. También absorben las toxinas y metales pesados que se encuentran acumulados en el organismo para expulsarlos del cuerpo.
¿Cómo se pueden comer las algas?
Esta es otra de las ventajas de las algas: la fácil preparación y su gran versatilidad. Como es un alimento de muchos minerales, lo más recomendable es no consumirlo en grandes cantidades. Se pueden agregar a las comidas que preparamos diariamente, ya que no cambian su sabor si no que lo potencian.
Por ejemplo, el alga llamada dulce es una de las más comunes y populares. Con ponerla par de minutos en remojo para ablandarla es suficiente. Se puede añadir a salsas, vinagretas, sopas, patés y bocadillos. Por otro lado, el alga kombu es ideal para cocinar legumbres. De esta manera se facilita la digestión de estos alimentos y además, se ablandan con mayor facilidad.
El sushi es quizá uno de los platos más conocidos cocinados con algas. En este caso, se utiliza el alga nori que tiene una forma de lámina muy fina. Dicha lámina se ablanda rápidamente y así se puede rellenar con cualquier alimento saludable como las verduras, setas, pescado o aguacate. Así puedes también evitar la harina para envolver los rellenos.
La crema de verdura, una receta muy saludable, puede incorporar el alga wakame. Esto le dará una textura mucho más cremosa, hará que sea un alimento más ligero y también le aportará al plato muchos minerales y nutrientes.
Recomendamos: Crema de calabaza
Y si hablamos de cocina moderna y saludable no puede faltar el alga agar agar. Este es un gelificante natural y vegetal que le da textura sólida a muchos alimentos y se evita el uso de gelatinas de uso animal. Es ideal para flanes, gelatinas, mermeladas y cremas.