Ya he hablado en otras ocasiones del grupo Pescaderías Coruñesas, que ha conseguido situar a Madrid como "el mejor puerto de mar en la capital de España", tanto con sus pescaderías como con los restaurantes El Pescador, O’Pazo, Filandón y, sus dos últimas adquisiciones, Lhardy y "Desde 1911".
Hoy quiero hablar del restaurante "Desde 1911", y no de sus pescados y mariscos que, por supuesto, son excelentes, sino de su carta de vinos.
Pescaderías Coruñesas
"Desde 1911" es la última creación de la familia García. Su nombre viene por el año en que el rey Alfonso XIII inauguró Pescaderías Coruñesas, en 1911. Años después, Evaristo García adquiría la propiedad y, a partir de ahí, se dio cuenta de que no bastaba con tener "el mejor puerto de mar en la capital de España", sino que sus clientes y amigos merecían un restaurante donde se cuide, se potencie y se perfeccione la materia prima.
Así es como nace El Pescador, después O’Pazo y, más tarde, el último que Evaristo pudo inaugurar en vida junto al alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, y conmigo: Filandón.
Ahora, sus hijos llevan la dirección del negocio. En los dos últimos años, Marta, Diego y Paloma García han conseguido completar la oferta con la adquisición de Lhardy, uno de los restaurantes históricos de Madrid (inaugurado en 1839 con la Reina Isabel II), y una nueva apertura, "Desde 1911".
Los vinos en "Desde 1911"
En mi última visita a "Desde 1911", descubrí algo que me pareció extraordinariamente original y atractivo para los clientes. Han conseguido elaborar una carta de vinos, sobre todo de tintos, con una relación de añadas absolutamente inusual y que no he visto en ningún otro lugar.
La carta incluye vinos de diferentes añadas organizados por bodegas, entre las que se encuentran algunas de las mejores de España, con breves reseñas sobre sus orígenes. De esta manera, han querido rendir tributo a las grandes bodegas nacionales que les han acompañado a lo largo de los años en Pescaderías Coruñesas.
Así, por ejemplo, se encuentra Artadi ‘desde 1985’, Cune ‘desde 1879’, Marqués de Murrieta ‘desde 1852’, Sierra Cantabria ‘desde 1870’ o Vega Sicilia ‘desde 1864’. Una de las referencias más amplias es la de Marqués de Riscal, con una oferta de vinos desde 1892 hasta 2017.
La vinoteca de Marqués de Riscal
Quiero aprovechar para destacar la gran aportación de las Bodegas Herederos del Marqués de Riscal a la cultura vitivinícola. Su origen data de 1858. Fueron los primeros que tuvieron la intuición de que valía la pena conservar los vinos, de la misma manera que se pueden conservar los libros. Junto a una espléndida biblioteca, crearon una espléndida vinoteca.
Marqués de Riscal guarda, en sus bodegas, vinos en buenas condiciones desde el siglo XIX. Muchos de ellos, en la Ciudad del Vino de Marqués de Riscal, que cuenta con un edificio diseñado por el conocido arquitecto y escultor Frank Gehry, por lo que se ha convertido en una visita obligada para los amantes y aficionados a la arquitectura.
Comer y beber en paralelo
Volviendo al restaurante "Desde 1911", es curioso que esa carta de vinos tan singular esté en un restaurante donde se toman pescados y mariscos. O mejor dicho, pescados, mariscos y quesos, porque su director de sala, Abel Valverde, el último fichaje de la familia García, ha trasladado el famoso carro de quesos de Santceloni a “Desde 1911”.
La carta de vinos también incluye una gran selección de vinos blancos, nacionales e internacionales, así como rosados, champagnes y cavas. Y termina con vinos de Jerez y de Oporto.
En todo caso, como ocurre en muchos restaurantes de nueva cocina, es perfectamente posible comer y beber en paralelo. Se pueden degustar los platos de pescado y marisco, tomar un poco de pan y, luego, un vino tinto de calidad. Vale la pena probarlo.
