Crudivorismo, la dieta que ya está en la RAE

Crudivorismo, la dieta que ya está en la RAE
En total, la RAE incluye recoge 330 novedades entre las que destaca 'crudivorismo', un tipo de alimentación basada en el consumo de alimentos crudos, es decir, aquellos que no han sido sometidos a procesos de cocción o calor.
Crudivorismo en el DLE
Crudivorismo en el DLE
Wednesday, December 17, 2025 - 11:00

A partir de ahora, cada vez que tu ordenador subraye en rojo la palabra crudivorismo, sabrás que toca actualizar el software: el término ya forma parte del Diccionario de la Lengua Española, que la Real Academia Española actualiza periódicamente. En su edición 24, la gastronomía y su evolución incorporan nuevas acepciones que reflejan cómo cambia la forma en la que hablamos —y comemos—.

La RAE y la edición 23.8.1 del DLE con más de 300 novedades

Este año, la RAE no ha sido especialmente prolífica en términos gastronómicos. De las incorporaciones, solo una puede considerarse estrictamente alimentaria. Otras voces nuevas, como simpa, cuentan con una larga y poco amable trayectoria social, mientras que palabras como bocachancla o comecocos mantienen referencias culinarias solo en su forma, no en su significado.

En total, la edición 23.8.1 recoge 330 novedades, muchas de ellas más cercanas a nuevas acepciones que a palabras completamente nuevas en un sentido tal vez menos ambicioso. Un ejercicio que demuestra el esfuerzo de la Academia por revisar la lengua y adaptar sus mecanismos normativos al uso real que hacen los hablantes.

¿Qué significa crudivorismo según la RAE?

El crudivorismo —también conocido como crudismo— es una dieta basada en el consumo de alimentos crudos, es decir, aquellos que no han sido sometidos a procesos de cocción o calor. En esta filosofía alimentaria se incluyen también la carne y el pescado, por lo que no debe confundirse con el crudiveganismo, que se limita exclusivamente a alimentos de origen vegetal. En este sentido, el crudivorismo es omnívoro.

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El crudivorismo a debate, ¿hay bases científicas para seguir esta dieta?

Quienes siguen una dieta crudívora deben prestar especial atención a los riesgos sanitarios, ya que el cocinado elimina bacterias como la Listeria o la Salmonella. La congelación, sin embargo, sí es compatible con esta práctica, por lo que parásitos como el anisakis no deberían estar presentes si se aplican correctamente los protocolos de seguridad alimentaria.

El objetivo del crudivorismo es preservar la naturalidad de los alimentos y evitar la pérdida de nutrientes sensibles al calor. Se trata de una filosofía que rechaza los efectos del modernismo y la industrialización, apostando por un retorno a lo natural.

Desde el punto de vista científico, el crudivorismo no cuenta con un respaldo sólido. Esto no significa que ciertos alimentos —especialmente los vegetales— no puedan consumirse crudos con beneficios, pero sí es cierto que el riesgo de intoxicaciones alimentarias aumenta en ausencia de cocinado.

Sus detractores recuerdan que la evolución humana está estrechamente ligada al control del fuego, las técnicas de corte, el cocinado y la domesticación de la agricultura y la ganadería.

Puede parecer una marcianada -también nueva palabra de la RAE- para algunos, pero lo cierto es que el crudivorismo ya está oficialmente reconocido como palabra. Y eso, al menos desde el punto de vista lingüístico, lo convierte en reflejo de una realidad.