Las mujeres son las que más padecen los problemas de circulación sanguínea. Sin embargo, hay que estar alertas para prevenir enfermedades ligadas a la circulación, como los infartos, la trombosis, flebitis, celulitis o los problemas cerebrovasculares.
Además, una mala circulación puede ser la responsable de los dolores frecuentes de piernas e incluso del frío constante en pies y manos. Sin embargo, el calor tampoco es un aliado de la buena circulación y por eso debemos evitar un hábito muy común en las mujeres: pararnos durante largos ratos a dos centímetros de la estufa.
A través de la alimentación y de algunas plantas medicinales podremos lograr que nuestro sistema circulatorio funcione mucho mejor y con eso, cuidar nuestra salud.
Los alimentos que ayudan a nuestra circulación son aquellos que no contienen grandes cantidades de sodio ni grasas saturadas. Entre el listado de productos protectores de la circulación se encuentran: las semillas de lino, girasol, los pescados, los frutos secos, el ajo.
Entre los remedios caseros que podemos aconsejarte para activar la circulación se encuentran las tisanas de Gingko Biloba, que tienen el poder de dilatar los vasos sanguíneos.
Si tu problema son los pies fríos debido a la mala circulación, existen algunos remedios populares que te ayudaran a que tus miembros inferiores estén más templados al activar la sangre.
Por ejemplo, puedes poner los pies en un recipiente con agua tibia y echarle un puñado de pimienta roja. También los baños con jengibre (kión) son muy buenos para activar la circulación en los pies.
Además, puedes potenciar tu circulación bebiendo un vaso de vino tinto por día, esta bebida ha demostrado su buenos beneficios para la salud cardiovascular.
También son muy útiles los masajes en las plantas de los pies, siempre en forma de círculo, puedes utilizar un aceite esencial para lograr mejores resultados.