El 2025 ya ha traído buenas nuevas para la gastronomía venezolana. El licor cocuy, tradicional destilado del agave cocuy, ha sido certificado con la Indicación Geográfica Protegida (IGP) en busca de garantizar su calidad y autenticidad, así como potenciar su presencia comercial internacional.
En especial, esta designación es beneficiosa a nivel económico para los estados de Lara y Falcón, de donde es originario y actualmente resultan sus mayores productores. Las mismas regiones aspiran a obtener este sello también en productos como el queso de cabra, la miel y las hamacas de Tintorero.
La certificación IGP, también conocida como Denominación de Origen (DO), resalta las características únicas que este licor adquiere gracias al entorno geográfico donde se produce, desde el clima hasta las técnicas artesanales empleadas por sus fabricantes.
Así, Venezuela apuesta por posicionar el cocuy como un emblema de su cultura y calidad.
Portada tomada de El Universal
