El platillo navideño más apreciado por los ingleses no es ni un pavo jugoso, ni su relleno cuidadosamente sazonado, ni las verduras preparadas y presentadas de manera impecable; se trata de una guarnición los pigs in blankets (cerdos en mantas), es decir, salchichas envueltas en tocino.
Su historia
Este modesto, pero absolutamente irresistible aperitivo de cóctel es tan sabroso que a menudo opaca al plato principal. Como sucede con muchas recetas populares, no hay un acuerdo sobre su origen exacto. La mezcla particular de salchicha envuelta en tocino ahumado y graso comenzó a ganar notoriedad en Gran Bretaña durante la mitad del siglo XX. El racionamiento de carne, impuesto durante la guerra, se levantó a finales de los años 40 y en la década de 1950, lo que permitió el regreso de platos más lujosos que incluían ingredientes como salchichas y tocino, los cuales volvieron a estar fácilmente disponibles.
Se piensa que esta sencilla, aunque algo exagerada, combinación de dos preparaciones de cerdo ganó popularidad en 1990, cuando la célebre Delia Smith, considerada la abuela de la cocina británica, los incluyó en su libro de recetas navideñas. Desde entonces, este aperitivo se ha vuelto tan querido que no solo se prepara en Navidad, sino que los británicos lo disfrutan durante todo el año. De acuerdo con una encuesta de YouGov, los pigs in blankets ocupan el undécimo lugar entre los platos más conocidos en el Reino Unido, detrás del fish and chips (pescado y patatas fritas, en primer lugar) y los beans on toast (tostada con alubias, en cuarto lugar).
¿Qué es lo que hace que los "pigs in blankets" sean tan irresistibles?
Su encanto se encuentra en su simplicidad y adaptabilidad. Proporcionan una exquisita combinación de tocino crujiente y ahumado con una salchicha jugosa y sazonada, lo que los convierte en un excelente acompañamiento o en un snack fácil de comer. La devoción del público hacia este platillo también se debe a que la alta gastronomía nunca ha reclamado su importancia cultural.
Sin embargo, además de eso, los pigs in blankets evocan una profunda sensación de nostalgia. Para muchos, están conectados a memorias de la infancia, como cuando mi abuela me enseñaba a prepararlos. También están relacionados con momentos de la niñez, como las cenas familiares, los bocados furtivos de la bandeja del horno y los bufés de fiesta durante los meses de invierno, cuando la temporada festiva se llenaba de diversión y comida, sin preocupaciones ni conteo de calorías.
En los últimos años, el Reino Unido ha acogido con entusiasmo los "pigs in blankets" y ha establecido el 12 de diciembre como el Día Nacional de los Pigs in Blankets. Desde sus humildes orígenes, este platillo se ha transformado en un clásico navideño, simbolizando el espíritu de la temporada con una receta tan sencilla, nostálgica y sabrosa que resulta imposible modificarla.
