La enfermedad celíaca consiste en una intolerancia al gluten, se caracteriza por una reacción inflamatoria, de base inmune, en la mucosa del intestino delgado que dificulta la absorción de macro y micronutrientes, lo que provoca una falta de asimilación de los mismos. La intolerancia es para toda la vida y, es por ello que, una vez diagnosticada mediante una biopsia intestinal (extracción de una muestra de tejido del intestino delgado superior para ver si está o no dañado) deberemos seguir SIEMPRE una dieta libre de gluten.
Pero… ¿Qué es el Gluten?
El gluten, presente en muchos tipos de cereales como: trigo, centeno, cebada, escanda, espelta, triticale, farro, kamut, espelta verde, bulgur y avena, es una glicoproteína, un aglutinante, que da elasticidad a las masas, por eso, se utiliza mucho en panadería y repostería. Es una especie de pegamento que hoy en día está presente no sólo en productos de alimentación sino también en cosmética, medicamentos, productos de limpieza, etc.
Funcionamiento de la enfermedad celiaca y algunos síntomas
El intestino tiene unas vellosidades intestinales responsable de la asimilación de los nutrientes, con la ingesta de gluten éstas van desapareciendo y los nutrientes no llegan al organismo. Esto se manifiesta en el organismo de muy diversas formas: alteraciones del carácter (irritabilidad, apatía, introversión, tristeza), artritis, falta de concentración, migrañas, alergias, dolores abdominales, síndrome de intestino irritable, dificultad para perder peso o ganar peso, problemas en la menstruación, infertilidad, etc.., síntomas que pueden estar ausentes, lo que dificultará el diagnóstico de la enfermedad celiaca.
Tipología
Un porcentaje importante de pacientes (75%) están sin diagnosticar debido a estas formas atípicas de presentarse que no correspondían con la clínica tradicional. Junto con el reconocimiento de esto y una mejor utilización de las pruebas complementarias, podemos decir que se distinguen tres tipos:
Sintomática: Los pacientes presentan una serología, histología y test genéticos compatibles con la Enfermedad Celiaca y presentan sintomatologías diversas.
Subclínica: No se aprecian síntomas, aunque las pruebas de diagnóstico serán positiva.
Latente: Pacientes que puntualmente, comiendo gluten no tienen síntomas y la mucosa intestinal es normal.
Potencial: Personas que no se han realizado una biopsia pero que realmente poseen una predisposición genética positiva del HLA-DQ2/DQ8.
Ahora que ya sabes lo básico sobre dicha enfermedad, estás preparado para adentrarte en nuestro mundo de consejos, ayudas y recetas sobre la celiaquía, los productos sin gluten y todo este mundo tan desconocido y tan a la orden del día.
Fuente: gastroagencia.es