El Festival Internacional Varadero Gourmet ha crecido. Diez años de trayectoria han ido perfilando su identidad y direccionando objetivos, conocimientos, interacciones, aprendizajes. Lo que comenzó como un evento dedicado exclusivamente al vino ha alcanzado dimensiones superiores y hoy es uno de los certámenes más reconocidos de la gastronomía y el intercambio profesional y empresarial del sector en Cuba.
En su edición más reciente el plato fuerte fue la Cocina cubana, y cada una de las múltiples conferencias, Master Class, degustaciones y competencias estuvieron dirigidas a ensalzar lo más autóctono del patrimonio culinario de la Isla grande, de la isla toda.
Temas como las elaboraciones emblemáticas de la cocina tradicional cubana y su valor patrimonial; la visión eco-gastronómica de proyectos nacionales; cacao y chocolatería; el maridaje molecular en los escenarios del chef y el sommelier; el homenaje al Chef Gilberto Smith; la gastronomía camagüeyana; el Habano y sus armonizaciones; la herencia y alta valía del Ron Ligero Cubano y sus Maestros; los acercamientos a la sinonimia aromática para definir a qué huele Cuba; entre otros muchos aspectos, enriquecieron el programa del animado cónclave.
A su vez, las presentaciones de productos como el Ron Caney Extra Añejo Remedios 500; los bombones no convencionales que está impulsando la Escuela de Chocolatería; el Ron Mulata Tropicana; las nuevas opciones que la Empresa Molinera de Cuba inserta en cuanto a las potencialidades alimenticias y comerciales de la harina integral; así como las presentaciones de vinos chilenos, españoles y californianos mantuvieron activos a los cientos de expertos que en la última semana de julio se dieron cita en el Centro de Convenciones Plaza América para participar en el Festival Internacional Varadero Gourmet 2018.
Con todo ello, el evento, diseñado por el Grupo Extrahotelero Palmares y el Ministerio de Turismo, se convierte en agenda obligada para los que de estos aspectos deseen actualizarse cada año. Si bien quedan elementos logísticos y organizativos por mejorar, el crecimiento en cantidad de participantes y expositores es notorio. Según se conoció en la Actividad de Clausura, en este 2018 participaron 60 entidades suministradoras, hubo un total de 22 países representados, mayor número de stands y una treintena de encuentros académicos y didácticos. A ello se suma además la celebración de seis competencias en las cuales aproximadamente 100 contendientes exhibieron su creatividad en tópicos como la cata a ciegas de rones cubanos; la preparación de entrantes fríos y calientes, tapas, postres típicos y estilizados tradicionales del país, coctelería, y también los maridajes.
El 10mo Festival Internacional Varadero Gourmet fue pues un espacio de exploración, aprendizaje e inventiva. Devino, asimismo, marco ideal para homenajear a aquellos que contribuyen a la formación de profesionales gastronómicos en Cuba y que, en estos días (y en cada jornada) se ve multiplicada en innumerables establecimientos de la isla. La semana ha sido una avanzada por el rescate y la valorización de lo que nos hace cubanos cuando de bebidas y alimentos se trata. Es, sin dudas, un impulso a la industria de la hospitalidad criolla.
Ya estamos a la espera de la nueva edición. El 2019 seguramente traerá más sorpresas y mucha cubanidad. Un excelente pretexto para volvernos a encontrar.
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