Para lograr este objetivo restaurador, se han puesto de acuerdo el propio FC Barcelona, Singularis (catering de autor de Serunión), y los hermanos Iglesias, empresarios gallegos afincados en la Ciudad Condal, propietarios, entre otros, de los restaurantes Rías de Galicia; EspaiKru; y Casa de Tapas Cañota.
En el acto de presentación celebrado en el mismo habitáculo destinado al restaurante del Camp Nou, presidido por el Director General de FC Barcelona, Nacho Mestre; Antonio Llorens Tabau, Presidente y Director General de Serunión; y los hermanos Iglesias, se alzó el telón de lo que ya es una nueva oferta restauradora de Barcelona, situada en el mismo corazón del Camp Nou.
Una singularidad podrán disfrutar los comensales que acudan a éste y es que el comedor está situado (Sala Roma) a dos pasos de acceso al Palco desde donde se contempla una panorámica espectacular de las gradas y el campo de juego. Un valor añadido para los que vayan a comer a Roma 2009, en un horario de 10 de la mañana a 6 de la tarde, todos los días, a excepción de cuando juegue el Barça en el Camp Nou.
Como referencia para los que deseen celebrar un ágape en este centro gastronómico barcelonista, la carta está configurada por cuatro apartados: "para empezar"; "bueno y saludable"; "cosas que no se deben dejar de probar"; y "para terminar". En el primero, destacan: ostras francesas del número 2 al natural (4,50 euros por unidad), anchoas de l’Escala (2,20 euros el filete), y croquetas de jamón ibérico (2,80 euros por unidad). En el segundo, Cebiche de dorada salvaje con leche de tigre de maracuyá (14,50 euros), ensalada de bacalao macerado, escarola y vinagreta de romesco (12,00 euros). En el tercero, sopa de pescado (16,00 euros), canelón de pollo de payés y foie (12,50 euros), arroz meloso de setas de temporada (21,00 euros), y dados de merluza a la andaluza can salsa tártara (19,50 euros). Y en el cuarto apartado, pastel de queso clásico (8,00 euros), y mouse de tiramisú con helado de cappucino (8,00 euros).
Para que el proyecto tuviera el éxito que se han propuesto los promotores, se ha contado con Singularis, símbolo de alta gastronomía. La experiencia y trayectoria profesional de esta empresa es una garantía gastronómica, demostrada en otros espacios emblemáticos de Barcelona como son el Gran Teatre del Liceu; el Palau de la Música; l’Auditori; y el Teatre Nacional de Catalunya.
