Las autoridades venezolanas han optado por incrementar las importaciones de alimentos básicos para paliar el desabastecimiento que vive el país, según informa en su edición del pasado 19 de marzo el diario ‘El Universal’. Mientras, prosigue el rotativo, “las asignaciones de divisas oficiales al sector privado para la compra de materias primas y otros insumos para la producción de rubros esenciales siguen con retrasos”.
Hasta la fecha, la Asamblea Nacional ha aprobado dos créditos adicionales –dirigidos a entes oficiales- por importe de 16.600 millones de bolívares (2.600 millones de dólares, unos 1.885 millones de euros) para las compras al exterior de, entre otros productos, pollo, carne, margarina, arroz, maíz (blanco y amarillo), leche (fresca y en polvo), aceite de soja y de palma, atún, legumbres, etc.
Al mismo tiempo que se instrumentan recursos para efectuar dichas adquisiciones públicas, “el Ejecutivo mantiene una deuda por las importaciones no liquidadas con el sector (…) de 2.400 millones de dólares (1.740 millones de euros)”, según la Cámara Venezolana de la Industria de Alimentos (CAVIDEA).
En fechas recientes, el presidente del Banco Central de Venezuela (BCV), Nelson José Merentes, afirmó que “el desabastecimiento no puede pasar de dos o tres meses más; hay que importar rápido y bien y producir y distribuir mejor”.
En enero, según los datos oficiales del BCV –de los que se hace eco ‘El Universal’-, la escasez de alimentos fue del 26%, consecuencia de “una menor oferta nacional e importada”. Fuente: El Universal
