Organizado con la participación de la Confederación Nacional Turística (CNT) de ese país, el evento contó con la presencia de Miguel Torruco Marques, presidente de dicho organismo. Asistieron también Víctor Absalón, Presidente Fundador Honorario Vitalicio de AMS; Arturo Samperio, Presidente de AMAIT Abastecedores Turísticos A.C.; Ignacio Torreblanca, Consejero Fundador Honorario de AMS; Gabriel Ortega Alcocer, Director General de la Cámara Nacional de Aerotransportes (CANAERO); Armando Bojórquez, representante de la Asociación Mexicana de Agencias de Viajes (AMAV); Rafael García, Presidente de la Asociación de Hoteles de la Ciudad de México (AHCM), y Armando de la Cruz Uribe, Presidente de la Asociación Mexicana de Hoteles y Moteles (AMHM).
En un mensaje dirigido a los asistentes, Torruco Marques afirmó que para el sector turístico, particularmente para las industrias hotelera y restaurantera, el tema del vino y el papel del sommelier como mediador entre la promoción de la cultura de esta bebida y el deleite del comensal son fundamentales.
Destacó que es necesario impulsar el consumo del vino en México, así como fortalecer su producción, pues aunque la calidad éste es indudable y se pronostica un crecimiento anual de la demanda nacional del 12 % durante los próximos cinco años, esta cifra es todavía baja si se la compara con el 25 % correspondiente al del mercado mundial, según datos de la Asociación Nacional de Vinicultores.
Durante su intervención, Absalón recapituló el proceso de fundación de la AMS, cuyos antecedentes se remontan a 1992, gracias a una intensa labor de un grupo de especialistas encabezado por Gabriel Fernández, y cuyos se esfuerzos se vieron consolidados en 1995, año en que fue registrada formalmente. Recordó también que fue en 1998 cuando la AMS recibió el aval de la asociación internacional.
Por su parte, Torreblanca se refirió al indispensable cambio de razón social que de esta incorporación ha derivado como requisito de permanencia; esto es, de sociedad civil a asociación civil, régimen que impide todo fin de lucro. El Consejero enfatizó además la naturaleza incluyente de la AMS, pues en ella pueden ser acreditados todos los profesionales de la sommelería independientemente de su escuela de procedencia, siempre que comprueben la solidez de su formación y su compromiso para la promoción de la cultura del vino.
Finalmente, Poncelis Brambila subrayó la necesidad de lograr la unidad del gremio mexicano e instó a los especialistas a integrarse a la AMS para conformar una sola asociación que permita conjuntar esfuerzos y dotar de completa confiabilidad a los organismos así constituidos, pues todavía hoy persisten perniciosos divisionismos.
