Priego de Córdoba es un municipio de la provincia de Córdoba, en Andalucía, cuyo entorno climatológico y geográfico favorece el desarrollo cultivos como la aceituna con su producto estrella el aceite de oliva virgen extra con Denominación de Origen Protegida. Sobre su presencia en el Salón de Gourmets habla para ExcelenciasGourmet su alcaldesa y presidente de la diputación de Córdoba, María Luisa Ceballos.
¿Participan habitualmente en el Salón?
Llevamos ocho años asistiendo, y creo que nuestra presencia unida a la D.O para productos como el aceite y el jamón Pedroches, constituye una magnífica sinergia. Nuestra provincia en general tiene productos alimentarios de calidad excepcional, y especialmente en este caso la D.O. del aceite de oliva de Priego de Córdoba, hoy la más premiada del mundo por los galardones obtenidos, tanto del Comité Oleicola Internacional como del Ministerio de Agricultura, y constituye un referente de calidad para todas las D.O. del mundo.
¿Cuáles son las características que hacen únicos a sus productos?
Se trabaja continuamente cuidando la calidad, con los agricultores, cooperativas y almazaras. Desde hace más de 20 años, nuestros agricultores cuidan que desde el primer momento cuando la aceituna se encuentra en el árbol, hasta que se extrae el aceite, todo tenga un proceso de altísima calidad. Desde la forma de recogerla como la de limpiarla y transportarla. No se recoge nada del suelo, todo se recolecta exclusivamente del árbol, y al final conseguimos un aceite de características muy especiales sobre todo por la aceituna de picudo y picual utilizada, y también con una línea especial de aceite ecológico, que en estos momentos es el de mejores características organolépticas.
¿Qué significado tiene esta D.O. en el extranjero, es también reconocida su calidad en otros países?
Nuestra calidad es reconocida en diversos países como Italia, e inclusive durante el último año algunas de las empresas que están aquí han abierto un mercado muy interesante en China, y es significativo que esta navidad, los autobuses en Pekín tenían la parte trasera decorada con la promoción de aceite de Priego de Córdoba. Creo que esto es un ejemplo de cómo estamos abriéndonos al mundo y pienso que se está trabajando muy bien hacia los mercados exteriores. Todos los premios que hemos ganado hacen que tengamos un reconocimiento internacional excepcional. Creo que hoy, si queremos seguir siendo una marca de referencia, tenemos que trabajar en mantener una calidad excepcional del producto, porque denominaciones y aceites hay muchas pero todas no tienen el paradigma de calidad que creo tiene la de Priego de Córdoba.
¿Hacia qué países principales están exportando?
Bastante a los Estados Unidos, tenemos una línea abierta de aceite hacia California, otra en Japón, y fundamentalmente Italia que es uno de los grandes consumidores de aceite de oliva, inclusive hay muchas marcas de aceite de oliva italianos que en realidad son de origen español.
¿Se han proyectado hacia la región de Iberoamérica?
Ahora mismo se está intentando abrir mercados en países que tienen una importancia económica como Brasil, algunos industriales están dedicando esfuerzos a abrir mercados en toda la zona de Sudamérica, a la cual nos unen muchas cosas como el habla y la cultura, en países como Chile donde tenemos industriales que ya tienen plantas en esa zona. En la provincia de Córdoba funciona de manera especial todo lo relacionado con mercados exteriores.
¿Que representa para ustedes tener estas posibilidades y aperturas internacionales?
Nuestra balanza comercial es positiva desde el punto de vista de la exportación por lo que supone la industria agroalimentaria. Tenemos clarísimo, no sólo en el aceite y el jamón sino en todos los productos agroalimentarios, que con la caída de la demanda interna el mercado exterior ha sido el que ha salvado la situación de las empresas y la industria agroalimentaria de la provincia de Córdoba, eso sin ningún género de dudas.
Esto ha venido sucediendo durante algunos años, especialmente el pasado cuando la demanda interna cayó en picado, y la exportación se incrementó más de un 4% al exterior. Esto quiere decir que esos mercados están funcionando bien y teniendo en cuenta que hay muchos países en expansión que reclaman productos de alta calidad y fundamentalmente que tengan una trazabilidad vinculada al tema de salud, estamos intentando ocupar esos nichos de mercado. Hay que seguir procurando que la industria agroalimentaria sea una industria saludable que pueda ofrecer garantía a todos los productos desde su inicio hasta el consumidor final, y creo que en España en general y en Córdoba en particular, tenemos mucho camino andado. Pienso que si seguimos trabajando bien esta línea comercializadora, donde todavía nos queda por hacer, y conseguiremos superar esta crisis en este sector.
