Pareciera que el helado ha estado a nuestro lado desde siempre, pero según algunas fuentes autorizadas como la International Dayri Foods Association, sus orígenes se remontan al siglo II de nuestra era. Aunque no se sabe con certeza el nombre de su inventor, se conoce que personajes tan importantes en la historia como lo fue Alejandro Magno o el sibarita Nerón, disfrutaba de preparaciones elaboradas con hielo o nieve a las que se le agregaban miel o néctares, incluyendo frutas o sus jugos. El hielo y la nieve estaban ahí, solo faltaba la creatividad humana para ponerle sabor.
De Oriente a Occidente
Refiere la historia, que fue Marco Polo quien encontró en China una preparación parecida a lo que hoy conocemos como helado. En su retorno a Italia trajo la descripción de un producto elaborado con frutas y hielo.
Posteriormente los italianos inventaron recetas y técnicas para elaborar helados con agua y leche. Bountaletín, uno de los cocineros de Catalina de Medici llevó e introdujo en Francia por primera vez el helado en la corte del rey Enrique II. La popularidad y el consumo de tan exquisito y refrescante compuesto se extendieron rápidamente. Cuando en 1670 el siciliano Francisco Procopio, abrió un café en Paris donde se comercializaba este producto, propicio su rápida popularidad entre la población.
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¿En copa o barquillo?
En el siglo XIX aparecen en libros franceses e ingleses diferentes referencias a la elaboración de barquillos o cucuruchos para helados. La palabra barquillo, es el diminutivo de la palabra barco, pues originalmente tomaron una forma convexa, semejante a los navíos. En los Estados Unidos, los barquillos se popularizaron a comienzo del siglo XX, cuando un neoyorquino llamado Italo Marchioni, patentó en 1903, una preparación comestible de pasta en forma de taza para contener helado. Muchos comerciantes de helados se han disputado su creación, mientras otros incluso se han adjudicado el haber sido los primeros en darle forma de cono.
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Algunas curiosidades que te dejan helado
De acuerdo con el libro Guinness, el postre más costoso del mundo es un helado que el tres de noviembre de 2007 comenzó a ofrecerse en el restaurante neoyorquino "Serendipity". Se trata de un Sundae de chocolate cubierto de una lámina comestible de oro de 23 quilates, que se sirve en una copa rodeada de un brazalete de oro y brillantes. Queda claro la razón o irracionalidad de su precio ascendente a 25 mil dólares.
El renombrado chef inglés Heston Blumenthal, ha elaborado durante varios años y se dice que con gran éxito, un postre con un curioso helado de huevo con tocino. La receta parece haber sido tan aclamada, que hoy en día es posible encontrarla en la web.
El helado frito, es un postre común en varios países asiáticos.
Resulta sorprendente que, según la Asociación Internacional de Productos Lácteos, los países de más consumo porcentual es de helados- litros al año/habitante, no son los países de climas cálidos, sino por el contrario, son aquellos que mantienen sus temperaturas bajas gran parte del año, como son: Nueva Zelandia (26.3) Estados Unidos (24.5) Suiza (14.4) Suecia (14.4) Finlandia (13.0).
Contrario a lo proclamado por sus consumidores, el gustado chocolate no es el helado más consumido a escala mundial. Lo preceden los sabores de: Vainilla 26 %. Frutilla (fresa) i19 %, ocupando el hijo predilecto del cacao el 12,9 % como tercero en la preferencia de los tomadores del codiciado alimento.
Así, después de este breve recorrido por la historia del más frio de nuestros placeres gustativos, cuando estemos disfrutando de un helado de nuestra predilección, podemos decir parafraseando a Napoleón Bonaparte frente a la Gran Esfinge de Guiza "Oh bendito helado, más de XXI siglos te contemplan".
