
Una historia de café, de selva y de comunidad es la que narra una Colombia natural. El eje cafetero es uno de los puntos geográficos más productivos del mundo, más aun si de su materia prima se habla. El café colombiano es uno de los ingredientes que hacen a la identidad nacional, cultural y gastronómica del país.
En este eje cafetero, se encuentra la finca Paloma Rivera, donde el elemento principal de la producción de café es el componente social. Así lo explicaba Albeiro Rivera, de Paloma Rivera Exotic Coffee, en Coffee Fest 2025 en Madrid a Excelencias Gourmet, donde presentaban unos cafés no solo excepcionales sino únicos pues también observábamos unos cafés aromatizados con cítricos o licores, una innovación que sigue las nuevas tendencias del mundo del café.
El arte del buen café se acerca a nuevos mercados y a las nuevas generaciones, se democratiza e innova de acuerdo a los nuevos rumbos de los amantes del buen café y una historia bien contada.
¿Qué hace tan especial al café de Paloma Rivera Exotic Coffee?
Nosotros tenemos una gran producción de café, pero lo especial es todo el componente social que nosotros tenemos en la finca. La llevan mujeres, cabeza de hogar, indígenas de una comunidad que se llama Enverachamil. Estas mujeres trabajan con nosotros en la finca produciendo, recolectando y fertilizando la tierra, solo recogiendo los granos rojos de la tierra. Por eso es que el café colombiano es tan suave, porque solamente se cosecha el grano rojo, es decir, el grano maduro.
Además, la compañía está certificada con la Rainforest, que quiere decir que nos aprobaron el componente social, pero también el componente ambiental, porque el café colombiano se cosecha manual en las montañas, dándole buen trato a las aguas, a los nacimientos de agua y a la arborización. Para producir un café colombiano tenemos que reforestar y darle buena tierra al café.
¿Cómo observáis que evoluciona el mercado del café?
Nosotros llegamos al mercado estadounidense y al mercado español.
El mercado español está cambiando bastante porque ya las personas jóvenes están aprendiendo a tomar café. Ya no quieren lo robusto, los cafés amargos, no solo quieren tomar café con leche o con azúcar. A estos cafés suaves que les dan muy buen trato en el cultivo, en el transporte, etc. son cafés que tú los tomas sin azúcar y esa es la nueva tendencia a nivel mundial: aprender a tomar café y cafés suaves y de calidad y aprendiendo sus notas y beneficios para el cuerpo.
Últimamente se escucha hablar del café infusionado, ¿cómo ofrecéis vosotros este tipo de café?
La tendencia ahora son cafés infusionados, pero nosotros vamos un paso más allá. No estamos infusionando los cafés, solamente aromatizarlos.
En el proceso de infusión, tú mezclas una esencia de vainilla, por ejemplo, y la mezclas con café. Al final lo que obtienes es que te tomas un café con sabor a vainilla. Nosotros ese proceso no lo hacemos, porque sería matarle todos los matices al café.
Nosotros lo que hacemos es aromatizar el café en barriles, con plantas o con barriles donde se ha procesado el ron o el whisky, ahí se aromatiza. Pero nunca se mezcla el whisky con el café. Cuando tú te tomas un café con aroma a ron o a whisky o a cardamomo o a mandarina, sabe a café y tiene todas las notas afrutadas, lo que verdaderamente lo produce la tierra.