FOTO: Clase de Catador Amateur en Cumbaya provincia de Pichincha. Cortesía de la autora.
En un país en la mitad del mundo, donde no existen las 4 estaciones, se pensaba que no podía ser un productor de uvas, no obstante, desde la colonia existían viñedos en un sector llamado Pomasqui, muy cerca del monumento de la mitad del mundo. En esa zona hubo una incipiente producción de vino enfocada, en esa época, a satisfacer las necesidades de la iglesia católica y sus celebraciones.
Sin embargo, el Ecuador de hoy cuenta con la Viña Dos Hemisferios en el sector costero de la provincia de Santa Elena, con una producción nacida desde hace 20 años. Los vinos han sido reconocidos internacionalmente, ganando premios por su excelente calidad. Así mismo, en la provincia de Loja, al sur del país, se tiene la bodega Los Guayacanes que ya muestra en sus primeras cosechas una excelente calidad.
La realidad es que sin ser el Ecuador un país reconocido como productor de vinos, hoy se puedan encontrar vinos de muchas denominaciones de origen del viejo y nuevo mundo, que le ofrecen al consumidor ecuatoriano la oportunidad de aprender y consumir vinos de muchas zonas del mundo.
En el año 2002, el consumo del vino en Ecuador era de una copa por persona al año. Con la creación de Cofradía del Vino, el consumo actualmente es de una botella y media por año. Han sido 21 años de fomentar la cultura del vino con cursos como el de catador amateur, el denominado wine ambassador, el de catador profesional, catas de diversa variedad, degustaciones, viajes internacionales, eventos internacionales como La Gala del Vino que se realiza cada dos años y su próxima edición 2024, etc.
Un factor determinante para este incremento en el consumo es el conocimiento que va acompañado con el desarrollo gastronómico. El conocedor del mundo del vino ya exige en un restaurante una carta de vino acorde a su gastronomía, copas de cristal, servicio a la temperatura adecuada, servicios adecuados por copas, etc. Ahora el Ecuador cuenta con una oferta de tiendas especializadas, así como los supermercados y las perchas cobran cada día mayor importancia en este campo. El incremento de las importaciones de vinos ha permitido un desarrollo gastronómico importante y un aporte significativo a la economía del Ecuador.
El desarrollo de la actividad y consumo del vino en el Ecuador ha venido acompañado de la creación en el año 2009 de la certificación de “sommelerie”, programa que se encuentra ya en su décima primera promoción siendo estudios de una duración de 2 años. El sommelier de La Cofradía del Vino además de aprender de vinos, estudia sobre los productos íconos ecuatorianos como el chocolate y el café.
Estamos conscientes de que aprender del vino acompaña la buena mesa, los negocios y las relaciones personales; y nos complace mucho haber sido parte del impulso a la cultura de este maravilloso producto.
“Mientras más sé de vinos, el vino me sabe mejor”, porque el que bebe vino con conocimiento, bebe arte, historia, geografía, siendo el vino el néctar de los dioses.
