Entre muchas otras explicaciones, la deshidratación es una técnica que, principalmente, extiende la vida útil de los alimentos y, a su vez, obtiene productos con mayor valor agregado, donde se potencian algunas de sus propiedades.
Sus usos pueden ser varios, en frutas y verduras están muy extendidos y, dentro de estos, los cítricos resaltan. Su empleo ya sea en la gastronomía o coctelería es amplio.
A continuación, te compartimos 3 técnicas sencillas para deshidratar cítricos en casa:
Utilizando agua con sal
1. Cortar cada cítrico en finas rodajas de un centímetro de grosor aproximadamente, y sin pelarlas.
2. Colocarlas en un recipiente con agua y sal hasta que queden totalmente cubiertas, durante unos 10 minutos, así el azúcar no caramelizará en el proceso de deshidratación.
3. Retirarlas del agua y dejarlas secar sobre un papel de cocina absorbente para extraerle toda el agua que hayan podido acumular. El tiempo variará en función de la temperatura, de si reciben luz natural o no, así como de cada cítrico, ya que cuanto más madura esté más tiempo tardará en deshidratarse.
Empleo de horno o microondas
1. En el horno, introducir la bandeja, en el programa para deshidratar o con calor arriba y abajo a 85º C durante una hora.
2. Tras una hora, dar la vuelta a todas las rodajas de naranja, dejar otra hora más y pasarlas a una rejilla, pues el papel puede quedar húmedo y dificultar la deshidratación.
3. En microondas, colocar las rodajas de fruta sobre un plato apto para el mismo, asegurándote que éstas no estén unidas. Pon la función de descongelado de 30 a 45 minutos para evitar que se quemen.
Poniéndolas al sol
1. Situar las rodajas sobre un papel absorbente, y dejarlas secar sobre una superficie que reciba sol durante la mayor parte tiempo posible. Cuanto más sol reciban, menos tardarán en deshidratar las naranjas.