El sector de la restauración española alcanzó en 2024 una facturación de 3.842 millones de euros, cifra similar a los niveles de prepandemia. Las estadísticas, proporcionadas por Delectatech y Food Service España, indican también un crecimiento del PIB del 3,2%, aunque una ocupación un 0.3% menor a 2023.
Este panorama se ha visto favorecido por el auge del turismo en España, que experimentó un incremento del 10,1%. Sin embargo, el balance ha lanzado advertencias respecto a los desafíos del sector Horeca como el aumento de los costes operativos y la reducción del margen de beneficio debido a la inflación.
En términos de precios, arrojó que el ticket medio aumentó un 1,9%, aunque este crecimiento fue inferior a la inflación del 4,1%. Asimismo, la satisfacción del cliente descendió un 1,7% en comparación con el año anterior.
Por otro lado, se han generado más de 3.000 nuevos empleos, para un total de 95.000 trabajadores en el sector. Sin embargo, persisten desafíos como el impacto de la inflación en materias primas y la reducción de la jornada laboral en el sector servicios.
Más ingresos, menos rentabilidad
Las cifras del informe aunque demuestran la capacidad de adaptación de las más de 900 empresas que operan en este mercado, el gran reto es consolidar un modelo de restauración colectiva sostenible y de calidad que permita percibir mejores márgenes de beneficio.
En ese sentido, Mario Agudo, portavoz de Food Service España, subrayó:
“Es esencial que administraciones y actores del sector reconozcan su valor estratégico y apoyen su desarrollo”.
