Nuevos espacios
Pues bien, desde hace algo menos de un año, La Aventura del Saber se ha llenado de contenidos gastronómicos, resultado de la implicación en el programa de la Real Academia de Gastronomía, que se responsabiliza de diferentes microespacios. Todo ello ha sido posible gracias al apoyo de Salvador, quien dirige el programa desde 2007, aunque lo llevaba presentando desde una década antes, y ha sabido entender muy bien que todo lo que rodea a la buena mesa es una de las disciplinas más interesantes de nuestro tiempo, como sabía combinación de salud y de placer. Comemos para subsistir, también para disfrutar, un mensaje de máximo interés para los más jóvenes en su proceso educativo.
Asimismo, me gustaría resaltar la colaboración de la redactora del programa, Begoña Vázquez de la Paz, y de mi “mano derecha”, Anuchina Postigo, fundamentales a la hora de llenar de contenidos los diferentes espacios.
El minuto gastronómico
Los lunes y los miércoles, el programa se inicia con El minuto gastronómico en el que, en relajada conversación con el propio Salvador Valdés, pasamos revista, brevemente, a los grandes temas relacionados con la alimentación y la buena mesa. En realidad, hablamos de todo: desde “la libertad en la cocina” hasta “las bondades del ajo”, pasando por “la importancia del desayuno” o “la educación del gusto”. Y un largo etcétera, hasta el medio centenar de minutos que se han emitido hasta ahora (y los que están en preparación).
Armonías gastronómicas
Cada dos semanas, el Minuto gastronómico de los miércoles es sustituido por la sección Armonías, buscando los mejores acompañamientos líquidos para una amplia gama de productos, como el jamón de bellota, los berberechos, las croquetas caseras o las gildas, contando con la compañía y el conocimiento del gran cocinero Pedro Larumbe (en el estratégico y espléndido restaurante El 38 de Larumbe que regenta en pleno Paseo de la Castellana).
De estas armonías han surgido diferentes “parejas de baile”. Así, el mejor acompañante para una lata de berberechos es una ginebra mediterránea como Gin Mare, aunque también la probamos con cerveza o con un vino blanco. Para un turrón, la mejor compañía es un Pedro Ximénez, un moscatel o un cava. Y para las las gildas, el mejor resultado fue una cerveza ligera. Por supuesto, el jamón ibérico de bellota da lo mejor de sí mismo con un fino o una manzanilla y, en ocasiones, con un tinto ligero.
Incluso en esta sección, que es un maravilloso divertimento, reivindicamos algunas “parejas” de sólido y sólido, como las uvas con queso o los espárragos blancos con diferentes salsas (mahonesa, vinagreta, mostaza…). Muy interesante la armonía del pan con aceite de oliva. Sin duda, con picual.
Y en breve se incorporarán al elenco gastronómico del programa de La 2 entrevistas con los mejores chefs españoles, un recorrido que se iniciará con los madrileños Mario Sandoval (Coque) y Sacha Hormaechea (Sacha) y los alicantinos Quique Dacosta (Quique Dacosta Restaurante) y Kiko Moya (L’Escaleta). Todos, de la mano de Begoña.
Contenidos gastronómicos variados y, creo, muy interesantes para la audiencia de un programa dinámico, que pasa revista todos los días a disciplinas como la arquitectura, el teatro, la literatura o la educación. Entre ellas, se ha asentado con orgullo la buena mesa, que es artesanía y cultura, una de las mejores formas con que cuentan los más jóvenes para iniciarse en una apasionante “Aventura del Saber”.
