Refrescar durante el verano sin por ello renunciar a tomar una copa de vino puede ser una excelente opción con esta receta, que además de asegurarnos espantar la canícula, incluso puede ser un toque de buen gusto y hasta quién sabe si un excelente afrodisíaco por los componentes que contiene.
Igualmente demuestra la generosidad de ese grandioso producto que es el vino, ideal compañero para cualquier momento de la vida.
INGREDIENTES
175 gramos de azúcar
La piel de una naranja
80 ml de zumo de naranja
2 cucharadas soperas de zumo de limón
1 canela en rama
Un poco de clavo
130 ml de agua
Una botella de vino tinto al gusto
Menta para decorar
Preparación:
Poner el azúcar, el zumo de naranja, el zumo de limón, la canela, la piel de la naranja, el agua y el vino en una cacerola, y calentar lentamente hasta que todo el azúcar se haya disuelto. Dejar reposar y enfriar. Posteriormente se filtra y se coloca en un recipiente plano en el congelador.
Servicio: Una vez congelado podemos servir unas cucharadas en copas bien frías y decorarlo con menta fresca. Receta extraída de: Extrem