
Una imprescindible de la repostería madrileña como Viena Capellanes no se podía quedar atrás en la oferta dulce de esta Navidad. Por ello, han diseñado una amplia gama de postres que combinan tradición y creatividad. Los protagonistas serán los roscones, turrones, troncos y la Tarta Sacher.
Con una producción prevista de más de 80.000 unidades de todos los tamaños, los roscones son la gran apuesta de Viena Capellanes para este diciembre y comienzos de 2025. Las versiones van desde el clásico, con frutas escarchadas y rellenos de nata, crema o trufa, hasta innovaciones como el rosconcito de Reyes de Baileys, que combina nata aromatizada con Baileys y un baño de chocolate caramelizado.
En Viena Capellanes, el roscón se elabora con harina fuerte, mantequilla, azúcar, sal, ralladura de limón y naranja, levadura, huevo líquido, ron, agua y el toque especial de azahar, que le otorga su característico aroma.
Por otro lado, en el caso de los turrones, se incluyen las variedades: toffee y nuez, yema tostada, praliné y café, coco y naranja, chocolate y frutos secos. Mientras, de los troncos de Navidad se ofrecen sabores como crema de Lotus, con bizcocho de especias y decoración de chocolate, tres chocolates, mezcla de chocolate negro, con leche y blanco; vainilla y chocolate, con una mousse de vainilla Bourbon y un cremoso de chocolate caramelizado; y crema de Baileys.
Como cierre, la edición especial de la Tarta Sacher es una joya exclusiva de estas fiestas. Inspirada en un reloj de fin de año, combina el clásico bizcocho de chocolate con mermelada de albaricoque y una capa de intenso chocolate negro.