En Navidad se come, se bebe y, sí, también se gasta más. Pero cuando el dinero se invierte bien, ¿sigue siendo un exceso o se convierte en un regalo memorable? Si esa inversión se traduce en el mejor postre de la mesa de Nochebuena, el gasto deja de ser lo importante y el disfrute pasa a ocupar el primer plano. Este año, el broche dulce lo firman Las Tartas de Julita y Turrón 1880, con una creación exclusiva: una tarta de queso elaborada con el turrón más caro del mundo. Una colaboración excepcional que une la tradición turronera española con la creatividad de la pastelería contemporánea.
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Las Tartas de Julita y Turrón 1880: la colaboración más esperada
La icónica tarta de queso de Julita —cremosa, suave y elaborada con queso fresco— se reinventa en esta edición especial al fusionarse con el sabor intenso, elegante y profundamente aromático del turrón premium de 1880. Una receta que eleva el postre navideño a una experiencia gastronómica de alto nivel.
Con esta propuesta, Las Tartas de Julita refuerza su apuesta por la innovación en repostería artesanal, mientras que Turrón 1880 consolida su posición como referente indiscutible del producto navideño español de alta gama.
¿El turrón más caro del mundo en una tarta de queso?
La idea fue clara y se llevó a cabo sin concesiones: calidad y exclusividad también pueden expresarse en forma de tarta de queso. El turrón de 1880 se elabora con almendra seleccionada de Jijona y, en función de los ingredientes que lo acompañan, puede alcanzar hasta 900 euros por tableta, una cifra que habla por sí sola del nivel de excelencia de esta materia prima única.