El plan para niños más socorrido del verano son los campamentos; una vía de escape para padres y un tiempo divertido para los pequeños. Pero, ¿qué pasa cuando llega el fin de semana… o sencillamente, por el motivo que fuere, permanecen en casa?… Toca agenciarse alternativas creativas para entretener, instruir y mantenerlos a buen resguardo.
Aunque pueda parecer alguna versión de la saga Misión imposible, hay actividades muy atractivas en casa para hacer padres y niños. Una de ellas es hacer de las cocinas un lugar para ellos. Y es que todo niño tiene una sed de chef cada vez que observa a algún familiar frente a los fogones. Aprovecharlo para darles la posibilidad de crear juntos recetas sencillas, chulas y seguras, es la mejor manera de hacerlos felices.
Así que te traemos 3 recetas fáciles de postres para hacer en casa como forma de pasársela bien pero también de inculcarles el amor por la cocina y sus valores.
Piruletas de sandía
Uno de los postres más divertidos para los pequeños son las piruletas. Este a su vez, es triplemente recomendado por su sabor pero también por sus propiedades y obvio encaja a la perfección en el verano como alimento ligero y fresco.
Los ingredientes son: sandía, 150 gramos de chocolate semidulce, 150 gramos de chocolate blanco, 3 cucharadas de mantequilla, fideos de colores, virutas de chocolate, palitos de helado y papel de horno.
Corta la sandía en trozos triangulares e introduce cada uno en los palitos de helado. Guárdalos en la nevera. Luego, coloca el chocolate semidulce y 1 ½ cucharada de mantequilla en un bol en el microondas a máxima potencia durante 30min para que se derrita. Haz lo mismo con el chocolate blanco y la mantequilla.
Saca las piruletas de la nevera y colócalas sobre el papel de horno. Viérteles chocolate sobre cada trozo, dándole la vuelta para que se cubra toda la fruta. Antes de terminar, decora con los fideos de colores y las virutas de chocolate. Llévalos a la nevera nuevamente.
Helado de chocolate casero
El chocolate siempre es un buen aliado para conquistar a los niños. No hay excusas para no hacer esta delicia. Puedes prescindir de heladera, gracias a la base grasa de la manteca de cacao y los lácteos. Lo primero es hacer la base, una crema a partir de una mezcla templada con nata líquida (330 ml), leche entera (100 ml) y leche condensada (100 ml).
Cogemos huevos y separamos la clara de la yema, la cual se bate manualmente hasta que quede con textura cremosa. Luego, se añaden las yemas a la crema de leche junto con una cucharada de esencia de vainilla, chocolate en trozos de 2 tabletas y 2 cucharadas de cacao en polvo. Todo esto se remueve hasta que se funda el chocolate, y estén los ingredientes bien integrados.
Dejamos unos minutos a fuego lento y sin dejar de remover hasta que espese un poco (no debe llegar a hervir o se cortará) y luego poner a enfriar por 3 horas y en caso de no usar heladera dejar una hora extra en el congelador.
El siguiente paso es mantecar que es el proceso que le otorga la textura de helado. El objetivo es convertir la crema en una especie de mantequilla a través del movimiento. Durante 2 horas y media se deja el helado en el congelador y se remueve cada poco tiempo (primero 10min, luego 30min, etc) para evitar que cristalice. Al final de todo, le añadimos trocitos de chocolate picados y dejamos definitivamente en el congelador hasta el día siguiente.
Mousse de fresa y M&M´s
Para ello primero montamos la nata o crema de leche con ayuda de una batidora con varillas. Vamos a necesitar 75 g. de azúcar y 200 ml de nata o crema de leche para montar. Se hará en un bol grande que esté frío. La temperatura idónea es de unos 10º C. Se debe batir unos 3-4 minutos hasta que pase de estado líquido a una especie de crema, con un poco de espuma. En este punto, añadimos azúcar, si es glass mejor.
En otro bol montamos 2 claras a punto de nieve con la ayuda de una batidora de varillas. Le añadimos un poquito de sal y en la mitad del proceso añadimos el azúcar (25 g) hasta obtener un merengue de consistencia bastante dura. Lo guardamos en la nevera. Trituramos las fresas y los M&M´s. Mezclamos todos los ingredientes con movimientos envolventes. Guardamos en la nevera unas 3 horas mínimo antes de servir. Por último, decoramos espolvoreando con los M&M’s troceados.
