Mantener una alimentación saludable y equilibrada es uno de los factores imprescindibles para el correcto desarrollo de cualquier ser humano. Por eso, es importante incidir en la necesidad de adquirir hábitos saludables desde edades tempranas.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el 29% de los menores escolarizados comprendidos entre los 7 y los 9 años, tiene sobrepeso u obesidad en España. Son los resultados que arroja el último informe COSI (Childhood Obesity Surveillance Initiative).
Iniciativas como la que está impulsando el Instituto Europeo de Innovación y Tecnología (EIT-Food) y la Fundación Española de la Nutrición (FEN), a través del programa EDUGASTRO, son fundamentales para educar a la población y crear conciencia.
Edugastro
Edugastro es un proyecto de educación alimentaria que está basado en el fomento de los valores de la Nueva Gastronomía (saludable, solidaria, sostenible y satisfactoria).
En ese marco, se crearon los programas PANGEI y PANGEP (Programa de Alimentación, Nutrición y Gastronomía para Educación Infantil y para Educación Primaria, respectivamente), que incluyen contenidos didácticos para enseñar a los niños a alimentarse correctamente. Bajo el nombre más popular “El gusto es mío”, los programas tienen como objetivo enseñar a los niños conocimientos nutricionales y hábitos alimentarios saludables, no sólo en los colegios con la ayuda de profesores y monitores de comedor, sino también en las casas, con el apoyo del entorno familiar.
Extracto del programa PANGEI.
Educación Alimentaria
Como me decía mi gran amigo Grande Covián: “Rafael, no te empeñes, la gente comerá lo que debe, si le gusta”. Y es que el placer debe ser un medio para conseguir un fin: la salud.
Así, comprender la necesidad de alimentarse adecuadamente y aprender a disfrutar con la comida se convierten en el motor de esta iniciativa, enfocada el fomento de la cultura alimentaria desde la base, para que los más pequeños puedan crear hábitos saludables que les servirán durante toda su vida adulta.
Avalado por los Ministerios de Educación y de Sanidad, el programa se empezó a implementar en los centros escolares hace ya dos años. En el curso 2022-2023, se está aplicando en 20 centros de enseñanza primaria de toda España, a través de charlas formativas y talleres del gusto. Mediante un test previo y otro posterior que se realiza al finalizar el programa, se obtiene un conocimiento de las enseñanzas y habilidades que los niños han desarrollado con el mismo.
El público objetivo de estos talleres son los alumnos de entre 3 y 12 años, a los que se trata de educar en la importancia de consumir alimentos frescos y de temporada dentro de una dieta variada y equilibrada. El énfasis recae en crear un contenido didáctico, planteado desde el entretenimiento, donde los más pequeños participen y se sientan protagonistas y conscientes de sus elecciones alimentarias. Todo empieza como un juego de asociación de colores, sabores y texturas, junto con la procedencia de los alimentos, para afianzar los conocimientos adquiridos.
Rafael Ansón junto a José Manuel Ávila, director general de la FEN; Carmen Gayo, directora del Alto Comisionado para la Lucha contra la Pobreza Infantil; y Ernesto Gasco, Alto Comisionado.
Lucha contra la pobreza infantil
El sobrepeso, la obesidad y otros trastornos relacionados con una alimentación poco saludable son problemas de malnutrición que se asocian habitualmente a las sociedades más avanzadas. Pero no hay que olvidar el otro lado de la balanza. Todavía hay una gran parte de la población mundial que sufre de malnutrición por escasez de alimentos, algo que puede tener consecuencias irreversibles cuando se produce en edades tempranas.
Hace unos meses, la Academia Iberoamericana de Gastronomía y la Fundación Española de la Nutrición firmaron un acuerdo de colaboración con el Alto Comisionado para la Lucha contra la Pobreza Infantil, para contribuir a erradicar la malnutrición en el mundo, por exceso y por defecto, y defender los derechos fundamentales de los niños.
El presidente de la AIBG, Rafael Ansón, y el presidente de Hostelería de España, Emilio Gallego, firmando un acuerdo de colaboración.
Alimentación saludable en la hostelería
Para acabar con la malnutrición, es fundamental educar a la población. Y no solo a los niños a través de los colegios, sino también a los padres, a las familias y a la población general.
En ese sentido, la industria alimentaria y la hostelería pueden jugar un papel importante. En los últimos años, los consumidores se han hecho más conscientes del valor de llevar una dieta equilibrada para promover su salud y bienestar. Por ello, cada vez son más los restaurantes, tanto en España como en otros países de Iberoamérica, que se preocupan por ofrecer menús saludables dentro de su oferta gastronómica.
Y aquí cobra especial importancia la formación de los profesionales del sector gastronómico. Por ello, la Academia Iberoamericana llegó a un acuerdo con Hostelería de España para tratar de mejorar y ampliar la oferta formativa en el sector.
Mantener una alimentación saludable y equilibrada es uno de los factores imprescindibles para el correcto desarrollo de cualquier ser humano. Por eso, es importante incidir en la necesidad de adquirir hábitos saludables desde edades tempranas.
Por supuesto, estas y otras iniciativas que la Academia Iberoamericana está llevando a cabo con instituciones españolas pueden y deben trasladarse a cada uno de los países iberoamericanos, a través de sus Academias Nacionales.
