El Basque Culinary World Prize 2024 ha entregado su premio al chef Andrés Torres, tras darse a conocer el pasado junio. El cocinero catalán poseedor de una estrella verde Michelin lo mereció como reconocimiento a su destreza culinaria, pero sobre todo por su compromiso con la seguridad alimentaria y la sostenibilidad. En su novena edición, este premio destaca a aquellos chefs líderes en la promoción de proyectos transformadores de la sociedad, el medioambiente y las comunidades.
El acto de entrega ocurrió en el Basque Culinary Center, presidido por el Lehendakari Imanol Pradales con la presencia de Amaia Barredo, Consejera de Alimentación, Desarrollo Rural, Agricultura y Pesca del Gobierno Vasco, así como el reconocido chef Joan Roca, presidente del jurado del Basque Culinary World Prize.
De la mano de la ONG Global Humanitaria ha encabezado proyectos para garantizar el acceso a alimentos en diez países de África, América Latina y Asia, además de intervenir en situaciones de crisis. Su restaurante Casanova también ha sido clave para obtener este galardón, al constituirse referente de buenas prácticas sostenibles.
Al recibir el galardón Torres expresó su agradecimiento a su equipo y dijo aspirar que sea inspiración a más personas e iniciativas que hagan del mundo un lugar más justo y equitativo.
El Basque Culinary World Prize también reconoció con menciones especiales a los chefs Gisela Medina (Argentina) y Ángel León (España).
El impacto global de Andrés Torres
Al frente de Global Humanitaria, ha mantenido un enfoque centrado en la educación, el bienestar y el acceso a recursos básicos como alimentos y agua. A través de más de 200 comedores escolares gestionados por la ONG. Por otro lado, ha desempeñado similar labor en situaciones de emergencia, como zonas de guerra o desastres naturales, movilizando recursos y cocinas de campaña en momentos críticos y ofreciendo ayuda humanitaria. De manera que, con su cocina Torres contribuye a mejorarla vida de miles de niños y familias.
Mientras, dirige Casanova, un restaurante basado en ingredientes locales y métodos de bajo impacto ecológico, ubicado en el corazón del Penedés. De allí, salen en buena medida la financiación de sus iniciativas solidarias.
Portada tomada de la Guía Michelin