La tapa, esa “pequeña porción de algún alimento que se sirve como acompañamiento de una bebida” según la RAE, está normalmente compuesta por clásicos como embutidos, croquetas o patatas. Una tradición española que se ha abierto al resto del mundo y que se celebra cada tercer jueves del mes de junio, por lo que este 15 de junio se festeja el Dia Mundial de la Tapa.
El origen de esta seña de identidad de la gastronomía española no está claro, hay varias teorías. La primera se remonta al siglo XIII, durante el reinado de Alfonso X ‘El Sabio’, quien dispuso que los mesoneros debían servir las bebidas acompañadas de un bocado de comida para evitar que el alcohol se subiera a la cabeza de los clientes. Entonces empezaron a poner lonchas de jamón o de queso encima del vaso, que al mismo tiempo actuaba como tapa para evitar que los insectos y el polvo entrasen en el interior, de ahí su nombre.
La segunda teoría data en el siglo XIX, cuando Alfonso XII visitó Cádiz y pidió una copa de vino de Jerez. El mesonero tapó la copa con una loncha de jamón para evitar que la arena que levantaba el viento de levante entrara en el vino. Aunque la teoría más extendida dice que fueron los propios mesoneros los que comenzaron a acompañar las bebidas con algo de comer para que los clientes pudieran consumir más sin que el alcohol les hiciese efecto y así no montasen peleas a la salida de las tabernas.
Las tapas más comunes suelen ser las patatas bravas, las tablas de queso o jamón, croquetas, la tortilla de patatas o unas simples aceitunas. Sin embargo, estos tópicos han ido evolucionando e incorporando nuevas recetas de alta cocina e incluso procedentes de fuera de las fronteras españolas. Algunas de estas tapas son la ensaladilla de bogavante con espuma de mahonesa o puerro confitado a la brasa con salsa romesco.
Su expansión internacional ha dado lugar a que cada año se celebren varios concursos de tapas, aunque el más conocido en España es el Concurso Nacional de Pinchos y Tapas que se celebra en Valladolid.
En algunos bares las tapas van incluidas con la bebida sin coste adicional, sin embargo, también es común que los bares cobren al cliente por la tapa. Una práctica muy extendida, la del tapeo, especialmente en ciudades como Bilbao, León o Granada, donde encontrarás rutas de pinchos y tapas ricas, variadas y contundentes.