Feliz "9 d'octubre" a todos los valencianos y valencianas. En esta fecha conmemorativa en la que se recuerda que el rey Jaime I El Conquistador entró, allá por el siglo XIII, al terreno que hoy enmarcan los límites de la Comunidad Valenciana. Se celebra entonces la identidad del levante valenciano, y qué mejor manera de celebrar a que a través de una gastronomía tan identitaria.
La cocina valenciana es reconocida mundialmente por platos tan famosos como la paella, la fideuá o la horchata, entre muchos otros. Sin embargo, el Día de la Comunidad Valenciana coincide con una fecha muy especial para el territorio, como es Sant Donís, el día valenciano de los enamorados. Por ello, es que ocurre lo que allí se llama "la mocadorà". Este detalle consiste en regalar mazapanes de Sant Donís al enamorado o enamorada.
"Mocaorets" para celebrar el amor al más puro estilo valenciano
El mazapán es un dulce muy consumido en el territorio valenciano debido a que es un dulce de almendra, uno de los frutos secos más presentes en este suelo. Los mazapanes del 9 de octubre suelen saborizarse con frutas y es común verlos en los escaparates de las pastelerías con la propia forma de la fruta y los vegetales que se encuentran en la huerta valenciana.
El aspecto de los dulces conmemora la fertilidad y la buena fortuna y se remonta la tradición a la ofrenda que se le hacía anualmente en esta fecha a la esposa de Jaime I, doña Violante de Hungría, para augurarle una buena concepción de los futuros monarcas.
El nombre mocadorà tampoco es casualidad, ya que mocaor o mocador es el nombre que recibe el pañuelo en lengua valenciana. La denominación es fruto de la tradición: las bandejas que portaban los dulces eran envueltas con pañuelos blancos para que llegaran a salvo a su destino y celebrar el amor más romántico comiendo un mazapán fresco, jugoso y aromático.
Una curiosidad es que estos mismos dulces fueron prohibidos en el siglo XVIII, cuando se implantan los Decretos de Nueva Planta, que vedaban cualquier celebración en recuerdo a la Conquista de Valencia. Entonces, los confiteros valencianos crearon los “piulets i tronadors”, es decir, los mismos mazapanes pero con forma de petardo. El fuego es uno de los ingredientes principales con los que se cocina el carácter festiva valenciana, así que, en celebración y en protesta: fuego y pólvora, en cualquiera de sus formas, incluso si es dulce.
En la actualidad, cada 9 de octubre, el Gremio de Panaderos y Pasteleros de Valencia organiza el Concurso de Sant Donís, donde se decidirán los mejores mazapanes de frutas del año, así como el más bonito aparador. Se espera que las confiterías valencianas lleguen a preparar hasta 200.000 mocadoràs.
Un verso para Valencia entre pasión y gastronomía
"No había en Valencia dos amantes como nosotros", recita una pareja valenciana en algún rincón de la terreta, recordando las palabras que un día escribió el poeta Ausiàs March, mientras comparten una caja de mocaorets y homenajean el amor mutuo, propio y por la tierra.