Estados Unidos. Con más de 500 bodegas y distribuidores de más de una veintena de países representados y cerca de 1 500 marcas internacionales, la 8va Feria Internacional del Vino de Miami se consolidó como uno de los eventos más importantes en este país.
A la edición de este año asistieron al Centro de Convenciones de Miami Beach miles de personas, quienes disfrutaron de catas, degustaciones y conferencias magistrales en un espacio expositivo de 8.000 metros cuadrados, casi un 10 por ciento más del utilizado en el pasado año, crecimiento que se produce incluso pese a la crisis económica actual.
Por países, España, que ocupó un 15 por ciento de la superficie de la feria (menos de la mitad que en la edición pasada), siendo nuevamente el país que concurrió con un mayor número de bodegas (más de un centenar).
Especial presencia tuvieron bodegas procedentes de zonas y denominaciones de origen como Priorato, Rioja, Ribera del Duero, Rías Baixas, Toro, La Mancha, Uclés, Cariñena, Jumilla, Valencia, Penedés y otras.
Otros países presentes en la feria fueron Argentina, Chile, Francia, Alemania, Portugal, Estados Unidos, Italia, Uruguay, Nueva Zelanda, Sudáfrica, Escocia, y naciones tan novedosas en el sector vitivinícola como Ucrania y Georgia.
Francia, con medio centenar de bodegas, fue, junto con España, uno de los países con mayor representación en la feria, mientras que Argentina, con su apuesta por la uva malbec, ha visto como esta variedad se ha convertido en la locomotora del crecimiento de las exportaciones de caldos de ese país suramericano a Estados Unidos.
Aunque todavía es temprano para dar cifras finales, en el evento se dieron unas dos mil reuniones de profesionales y las ventas se espera superen el medio millón de cajas de vino.
Este año la feria miamense se asoció con Iberwine lo que ha consolidado a la Feria Internacional del Vino de Miami como una de las de más rápido crecimiento de todas la que tienen lugar en el estado de Florida, el segundo mayor consumidor de vino de EE.UU., sólo por detrás de California, según los organizadores.