Un grupo de apasionados por la gastronomía y expertos en el ámbito de la hostelería ha decidido oficializar su amor por el cocido madrileño a través de la creación de la Cofradía del Cocido Madrileño, la primera de este tipo en la ciudad. Este nuevo proyecto, liderado por Nacho Sandoval, tiene como objetivo preservar y promover el cocido madrileño como uno de los platos más emblemáticos de la cocina tradicional madrileña, al mismo tiempo que se impulsa la gastronomía como un atractivo turístico para la capital.
Entre los miembros fundadores se encuentran destacados profesionales del sector, como Antonio Cosmen, reconocido por su trabajo en Cruz Blanca de Vallecas; Pepa Muñoz, de El Qüenco de Pepa; Mara Verdasco, de Taberna La Bola; y José Alberto Rodríguez, quien continúa la tradición de Malacatín. También se unen a esta iniciativa otros nombres relevantes como Juan Pozuelo, Joaquín Felipe y Fran Vicente, todos ellos comprometidos con la autenticidad y la evolución del cocido madrileño.
La cofradía agrupa tanto a restaurantes con una larga historia como a propuestas más modernas, incluyendo locales emblemáticos como Los Galayos, Taberna Pedraza y Asador El Toril, así como nuevas incorporaciones como Taberna El Reloj, Carlos Tartiere y La Figal De Pablo. Con esta variedad, la organización tiene como objetivo reforzar el cocido madrileño como un plato que atraviesa generaciones y diferentes estilos culinarios.
El evento inaugural de la Cofradía contó con la participación de numerosos establecimientos que quieren aportar al legado de este plato y ha generado interés en medios especializados. Este evento se llevó a cabo junto a la grabación de un programa especial para Canal Cocina en la histórica Taberna La Bola, un lugar famoso por su método tradicional de preparar el cocido en pucheros de barro. Este escenario subrayó la relevancia de las cofradías en la promoción de la cultura gastronómica en España.
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El papel de Nacho Sandoval como Cofrade Mayor, junto con la participación de personalidades destacadas como Mara Verdasco y Antonio Cosmen en la vicepresidencia, asegura la seriedad y la permanencia del proyecto. Sandoval afirma que la cofradía no se limita a preservar la tradición, sino que también busca modernizarla, buscando nuevas maneras de disfrutar del cocido sin sacrificar su esencia.
En una época en la que la gastronomía es fundamental para el turismo, la Cofradía del Cocido Madrileño tiene la oportunidad de convertirse en un símbolo cultural, atrayendo tanto a residentes como a turistas que desean disfrutar de la verdadera cocina madrileña.
Con su constante expansión y la llegada de nuevos integrantes, la cofradía parece estar en vía de establecerse como un elemento clave de la gastronomía de Madrid, cuidando un patrimonio culinario que representa no solo un plato, sino una parte vital de la identidad de la ciudad.
