Las Fiestas Patrias son la mayor celebración al orgullo de una nación. Este mes de septiembre, toca el turno a Chile para homenajear sus tradiciones y sabores más auténticos. Se trata, sin dudas, de una oportunidad para deleitarse con los manjares típicos. Por eso en este artículo te proponemos acercarnos a platos y bebidas tradicionales para celebrar las Fiestas Patrias de Chile.
Empanadas de pino
Es uno de los platos más icónicos. Su receta consiste en una masa rellena de carne de vacuno, cebolla, huevo duro, pasas y aceitunas. Aunque cada familia tiene su variante. Su preparación tradicional parte de la cocción usando manteca de cerdo en una olla y cebolla picada junto con comino, ají de color, sal y pimienta. Mientras, en otra olla, se cocina la carne picada con el resto de la manteca hasta que esté bien dorada, luego mezcla con la cebolla y refrigera el pino hasta el día siguiente.
Para la masa, mezcla harina, sal y agua tibia con la manteca derretida, amasa hasta obtener una textura suave y elástica, estírala y corta 20 círculos de 15 cm de diámetro. Coloca el pino frío en cada círculo de masa, añade huevo duro, aceituna y pasas, luego dobla por la mitad y sella los bordes. Pincela las empanadas con huevo batido y hornea a 200°C durante 35 minutos o hasta que estén doradas.
Anticuchos
Los anticuchos son un clásico de la parrilla chilena y peruana, un plato que en cada brocheta lleva el sabor de carne a la brasa. Se suelen preparar con trozos de carne de vacuno o cerdo, previamente en especias y aliños chilenos, cebolla, pimiento, y en ocasiones, longaniza.
Lo primero será cortar la carne en trozos del mismo tamaño para lograr una cocción uniforme, aunque nunca se deben mezclar distintos tipos de carne en el mismo palillo. Para los anticuchos de vacuno, mezcla en un bol cebolla y pimientos cortados en cubos con aceite de oliva, ensarta alternando carne, chorizo, cebolla y pimiento, sazona con sal y asa a fuego medio. Si prefieres los de cerdo, adoba la carne de chancho en una mezcla de salsa de ají rojo, vinagre, orégano y sal. En caso de que te decantes por el pollo: marina cubos de pechuga y cebolla en una mezcla de aceite de oliva, ajo, ralladura de limón y sal, ensarta y cocina.
Choripán
El choripán, simple pero sabroso, es el rey de la comida callejera y de las fondas chilenas. Consiste en un chorizo jugoso, asado a la perfección, que se coloca dentro de un pan crujiente, acompañado a menudo con pebre, una salsa chilena a base de tomate, cebolla y cilantro. Es el favorito de muchos por su fácil preparación y sabor contundente.
La elaboración se hace a la parilla, por lo que el primer paso será poner los chorizos o longanizas en la parrilla durante unos 10 minutos, girándolos para que queden crujientes por fuera y bien cocidos. Unos minutos antes de terminar la cocción, abre las marraquetas por la mitad y tuéstalas ligeramente. Luego, inserta un chorizo o longaniza en cada una. Para acompañar puedes usar salsa chimichurri, mayonesa casera, pebre chileno o salsa verde.
Pastel de choclo
Hecho con una capa gruesa de maíz molido, su interior guarda un guiso de carne y pollo, acompañado de aceitunas y huevo duro. Para prepararlo deberás pochar las cebollas picadas en brunoise a fuego lento durante 15 minutos con una tapa. Luego, sube el fuego y agrega la carne picada de ternera, cocinándola por 3 o 4 minutos mientras la desmenuzas.
Añade el pimentón dulce, comino y albahaca, sazona con sal y pimienta, y mezcla bien antes de reservar el relleno. Para la masa, tritura el maíz cocido, la harina de maíz, la leche, la mantequilla, sal y pimienta en un vaso de batidora o procesador de alimentos. La masa debe quedar con pequeños trozos de maíz, sin ser completamente homogénea. Una vez listo, monta el pastel colocando el relleno de carne en una fuente, añadiendo las uvas pasas, las aceitunas negras y los huevos duros en rodajas.
Terremoto
Elaborado a base de vino pipeño, un vino blanco dulce, y coronado con helado de piña y un toque de granadina, su sabor dulce y refrescante es más de lo que parece. Para prepararlo se comienza añadiendo tres cucharadas soperas de helado de piña en dos vasos grandes. A continuación, vierte el vino pipeño en cada vaso, como sustituto puedes usa vino blanco y espumante.
Luego, añade una o dos cucharadas de granadina sobre el helado para darle dulzor, ajustando según tu gusto. Finalmente, disfruta de esta refrescante bebida, utilizando una pajilla o cucharilla para mezclar el helado con el vino y así integrar bien todos los sabores.
