La berenjena está presente en la dieta de millones de personas y lleva estándolo desde hace más de 4.000 años; además, su consumo es muy beneficioso para ciertas enfermedades y dolencias y aunque no para todo el mundo ni en cualquier forma de preparación.
Esta popular hortaliza tiene una especial importancia en la cocina mediterránea. Es un producto muy valorado debido a su gran versatilidad en el mundo culinario y también porque presenta muchos beneficios para la salud.
Se cultiva en zonas cálidas, secas y soleadas, perteneciendo a la familia de las solanáceas, al igual que el tabaco, el pimiento, la patata o el tomate. Existen muchos tipos de berenjenas, aunque las más conocidas sean las purpuras, las hay blancas, verdes, a rayas o anaranjadas. La época de cosecha de esta hortaliza es de junio a octubre.
Aunque tenga una gran presencia en países como España, su origen está en Asia y, a partir de ahí, se ha ido difundiendo por todo el mundo. En Asia se lleva utilizando desde hace 4.000 años en zonas como la India. Posteriormente, el alimento se fue expandiendo por toda la región, e incluso aparece en un tratado de agricultura chino del siglo VI d.C. Desde ahí se cultivaría en zonas como Persia y Egipto hasta que llegó a Europa a través de la Península Ibérica en el Edad Media.
La berenjena es un alimento que está presente en una gran variedad de platos de cocinas tradicionales, tanto de Asia, como de Europa, el norte de África y Oriente Medio. Pero en la cocina hay que tener en cuenta que para aprovechar todas sus propiedades no se puede preparar de cualquier manera.
Es ideal consumirla de forma asada, ya que así se emplea la totalidad de la misma. Otra opción es a la plancha. También está la variante frita, aunque menos aconsejada, pues hay que tener cuidado ya que puede absorber mucha grasa. Uno de las recomendaciones más populares para evitar que la pulpa de la berenjena absorba mucho aceite es sazonarla antes de su cocción.
Es una hortaliza que se complementa muy bien con otros ingredientes que están presentes en la dieta mediterránea como puede ser el ajo, la cebolla o el calabacín. Uno de los platos mas famosos que se hace con la berenjena es el ratatouille, muy parecido a lo que sería el pisto en España. Aunque, desde el punto de vista gastronómico, la mejor opción para la berenjena es el horno.
Esta hortaliza destaca principalmente por sus propiedades, ya que tiene algunas que son muy beneficiosas para la salud. La principal composición de la berenjena es el agua, la cual constituye un 92,6% y tiene muy pocas grasas. El otro principal aporte de este alimento es la fibra, que ayuda a regular la flora intestinal.
Su contenido en micronutrientes destaca principalmente por la presencia de potasio y ácido fólico. También tiene una gran presencia de antocianinas que son antioxidantes, como refleja en el color morado más característico de las berenjenas. Aunque, las principales propiedades de la berenjena están presentes en su contenido en compuestos químicos específicos, estos compuestos están en la piel y las semillas de forma más representativa.
Debido a lo anterior, las berenjenas son muy beneficiosas para el día a día: ayudan a la digestión de ácidos grasos, alivian la presión arterial, mejoran la salud de los riñones y la resistencia del organismo contra enfermedades en general.
Otross beneficios que presenta para la salud el consumo de berenjena son:
- Salud cardiovascular: la berenjena por su contenido en flavonoides, concretamente antocianinas, ayuda a reducir el riesgo de sufrir enfermedades cardiacas, ya que son antioxidantes. Esto es debido a que reduce los marcadores inflamatorios y ayuda a regular la presión arterial. También por su contenido en fibra y en ácido clorogénico ayuda a reducir el conocido como colesterol “malo”.
- Cáncer: por su contenido en antocianinas y acido clorogénico las berenjenas ayudan a reducir la posibilidad de crecimiento de tumores y células cancerosas. Esto se produce debido a que estos compuestos evitan que se formen nuevos vasos sanguíneos en el tumor, por lo tanto, se reduce la inflamación y se bloquean las enzimas para que se propaguen.
- Protege la función cognitiva: la berenjena combate ciertos trastornos nerviosos y también los previene por su contenido en nasunina, ya que protege las membranas de las neuronas. También ayudan a prevenir la neuroinflamación y facilitan el flujo de sangre al cerebro, además de reducir la descomposición de grasas en el mismo.
- Sistema nervioso: el consumo de la berenjena ayuda a reforzar el sistema nervioso y mejorar el estado de ánimo, por su contenido en vitaminas B6, B1 y magnesio. La vitamina B6 también es muy beneficiosa para las embarazadas porque previene la diabetes gestacional.
También hay que mencionar que no todo el mundo puede consumir este alimento de forma continuada y en gran cantidad, por su alto contenido de oxalatos. Este compuesto ayuda a la cristalización inicial de los cálculos renales, por lo que las personas que sean propensas a ello deben tener cuidado.