¿Dónde está el epicentro de la dieta mediterránea? Podríamos hablar, sin duda, de diversas ciudades bañadas por el mare nostrum, pero en la costa mediterránea española, a la ciudad de Alicante (y a su diversa y rica provincia) le sobran los motivos para reivindicarse.
Por eso, recientemente, hemos trasladado desde Barcelona a Alicante (concretamente a Casa Mediterráneo) la sede de la Academia de Gastronomía del Mediterráneo por diferentes razones, entre ellas, el posicionamiento estratégico, la estrecha vinculación de la ciudad con la dieta mediterránea y por la defensa que, desde los diferentes estamentos, se ha hecho siempre a favor de un estilo de vida saludable.
Alicante: Una geografía llena de contrastes
En efecto, la provincia alicantina presenta una geografía llena de contrastes. Por un lado, su franja litoral con sus puertos pesqueros y su aroma a salitre; por otro, sus vegas y huertas inundadas por cultivos de regadío y humedales que dan lugar a una flora y una fauna espectaculares. Alicante es también tierra de salinas, de pintorescos valles, de playas de ensueño y, acaso lo más desconocido, de unas altas montañas en las que se puede encontrar nieve durante buena parte del año.
De todas estas diversas procedencias se nutre una despensa prodigiosa que está en la base de la gran cocina de la tierra, una de las más singulares y diferentes del Mediterráneo (Saludable, Solidaria, Sostenible y Satisfactoria) valorada por la población cosmopolita que se reparte por todas las comarcas alicantinas.
Esta tierra cuenta, en efecto, con numerosos productos de calidad, muy valorados en el mercado internacional, y en ella se asientan cocineros tan prestigiosos radicados en su territorio como Quique Dacosta (Quique Dacosta Restaurante, tres soles Repsol y tres estrellas Michelin); Kiko Moya (L’Escaleta de Cocentaina, tres soles y dos estrellas); Alberto Ferruz (Bon Amb de Xabia, tres soles y dos estrellas); Susi Díaz (La Finca de Elche, dos soles y una estrella); María José San Román (Monastrell de Alicante, dos soles y una estrella); Antonia Ballester (Casa Pepa de Ondara, dos soles y una estrella); Rafa Soler (Audrey’s de Calpe, un sol y una estrella); José Manuel Miguel (Beat de Calpe, un sol y una estrella); Orobianco (en Calpe, con una estrella) y Cristina Figueira (El Xato de La Nucia, una estrella). Entre otros muchos restaurantes excelentes.
Tres restaurantes tres estrellas Michelin
En conjunto, se distribuyen por toda la provincia alicantina 13 estrellas Michelin (un restaurante de tres, dos de dos y seis de una estrella) y una treintena de soles Repsol, de los cuales tres (Quique Dacosta Restaurante, Bon Amb y L’Escaleta), tienen el máximo de tres soles, porque son tres de los mejores restaurantes de España.
En la primavera de 2018, en coincidencia con el congreso Alicante Gastronómico, suscribimos la Declaración de Alicante sobre Dieta Mediterránea tanto con el Gobierno regional como con la Diputación alicantina, que puso punto final al Encuentro Dieta Mediterránea, una visión multidisciplinar en el siglo XXI: Alicante, punto de encuentro.
Como sede de la Academia de Gastronomía del Mediterráneo, esta maravillosa provincia levantina reafirma esa condición de epicentro del mare nostrum, lugar de recepción de todas las culturas y todas las cocinas, como kilómetro cero de la historia del mundo.