Este 15 de diciembre las magdalenas están de fiesta, celebramos el Día Mundial del Cupcake. Originario de Estados Unidos, el cupcake o magdalena ha pisado con fuerza ya todo el orbe gracias a su tamaño y versatilidad. Y aunque la receta suena muy moderna por su gran popularidad en jóvenes generaciones, su historia se remonta a más de dos siglos.
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La primera receta documentada de lo que hoy conocemos como cupcake apareció en 1796 en el recetario American Cookery de Amelia Simmons. En sus inicios, eran descritos como “tartaletas cocinadas en pequeñas tazas”, debido a la ausencia de moldes específicos. Evidentemente, hoy su elaboración tiene una estética es mucho más refinada aunque no pierde su esencia: su base esponjosa y decoración con glaseados llamativos y coloridos.
Receta clásica de cupcakes
Ingredientes (para 12 cupcakes):
- 200 g de harina de trigo
- 150 g de azúcar
- 120 g de mantequilla (a temperatura ambiente)
- 2 huevos
- 120 ml de leche
- 1 cucharadita de levadura química
- 1 cucharadita de extracto de vainilla
- Una pizca de sal
Para el glaseado:
- 250 g de queso crema
- 100 g de mantequilla (a temperatura ambiente)
- 300 g de azúcar glas
- 1 cucharadita de extracto de vainilla
- Colorantes alimentarios y toppings (opcional)
Preparación:
- Precalienta el horno a 180 °C. Tamiza la harina con la levadura y la sal en un bol. En otro recipiente, bate la mantequilla con el azúcar hasta obtener una mezcla cremosa. Incorpora los huevos uno a uno, seguidos del extracto de vainilla. Agrega los ingredientes secos en tres partes, alternando con la leche.
- Llena los moldes para cupcakes (con cápsulas de papel) hasta 2/3 de su capacidad. Hornea durante 18-20 minutos o hasta que al insertar un palillo salga limpio. Deja enfriar sobre una rejilla.
- Bate la mantequilla con el queso crema hasta obtener una mezcla homogénea. Añade el azúcar glas poco a poco y, finalmente, el extracto de vainilla. Divide la mezcla en porciones y agrega colorante si lo deseas.
- Usa una manga pastelera para aplicar el glaseado sobre los cupcakes fríos. Decora con toppings como chispas de chocolate, frutas o figuras de azúcar.