El informe Tendencias en la restauración colectiva 2023, elaborado por la empresa de restauración colectiva Mediterránea, apunta que la caída de la inflación lleva a pensar en un incremento del gasto fuera del hogar en España.
Específicamente, el informe detalla que, de mantenerse la caída de la inflación, se puede suponer el incremento del gasto fuera del hogar, de modo que el 78 % de los españoles aumentará las comidas fuera de casa durante los próximos meses, mientras que el 63 % hará lo mismo con las cenas.
Las tendencias en la restauración colectiva según la empresa Mediterránea, son:
Reformulación del menú del día
El menú del día seguirá siendo una constante en el almuerzo de los españoles y, a medida que se asiente el trabajo híbrido, este formato de alimentación recobrará fuerza, sobre todo en determinadas zonas de las ciudades como los distritos financieros y los espacios de negocios.
Sin embargo, la clave ya no estará en cuánto se come, sino en qué se come, lo que implicará reinventar el formato para priorizar calidad frente a la cantidad.
En esta línea se acentuará la evolución del menú tradicional con primer, segundo plato y postre hacia un modelo más orientado a combinaciones de nutrientes en un plato único o en menús que no respondan necesariamente al modelo clásico, como los poke-bowls, los platos únicos o las ensaladas con toppings irán orientadas a permitir al usuario elegir de acuerdo con sus gustos, pero con combinaciones de proteínas, verduras e hidratos que resulten completas y saludables.
En general se buscarán soluciones que aporten el valor nutricional necesario para reponer energías y volver al trabajo rápidamente, evitando las comidas copiosas y las digestiones pesadas. En definitiva, una reformulación del menú del día hacia un modelo más europeo, que propone comer un único plato y que responde a una forma de entender la alimentación más pragmática y eficiente, sin renunciar a los gustos del cliente.
Opciones más saludables
En línea con la preocupación ciudadana por fomentar más hábitos de vida saludable, los consumidores ya son conscientes de que comer más no necesariamente implica comer mejor, de modo que las opciones y platos de alimentación saludables cobrarán protagonismo en el almuerzo diario en sustitución de la comida rápida y del tradicional recalentado de ultraprocesados en el microondas.
En lo que respecta a los modelos alimenticios, la dieta mediterránea seguirá siendo la gran referencia, principalmente por la gran variedad de materias primas que contempla, lo que deriva en una amplia oferta de recetas con las que ofrecer al usuario una comida saludable haciendo siempre un uso equilibrado de los ingredientes.
En este sentido, verduras y frutas, a las que hay que sumar los cereales integrales, tendrán cada vez más presencia en los menús, al igual que ocurrirá con todos aquellos alimentos que ofrecen una alta cantidad de proteínas, como es el caso de las legumbres. Asimismo, se incentivará el uso de productos frescos y de cercanía, a medida que decrece el peso que tienen las carnes rojas y los alimentos altamente calóricos.
Sostenibilidad y medioambiente
La restauración hará más presente su compromiso con la sostenibilidad implementando opciones de consumo más respetuosas con el medioambiente, con un mayor esfuerzo por la reducción del desperdicio y una mayor apuesta por proveedores de cercanía y productos de temporada.
Sin embargo, lo más destacable es cómo esa apuesta se trasladará al cliente. No se tratará tanto de ser sostenible sino también de demostrárselo al comensal. Habrá un gran uso de formatos rellenables y de dispensación para bebidas, de cubiertos reutilizables, así como de recipientes biodegradables. Soluciones que convivirán con un menú que informará de las medidas de sostenibilidad llevadas a cabo por el restaurante y de la procedencia de las materias primas, con especial presencia de productos de origen natural y ecológico.
Take away y delivery
Cada vez más empresas incorporarán los envíos a domicilio y la comida para llevar como fórmulas exitosas con las que atender a la demanda de un consumidor cuya alimentación responde también a nuevos momentos de consumo.
En ello, la innovación será una constante que permitirá abordar la restauración de forma más eficiente y aportando un mayor valor añadido al servicio. Un camino que iniciaron los códigos QR, las cartas online y las pantallas digitales y que proseguirá con la incorporación de otras tecnologías aún por desarrollar que harán que la experiencia del consumidor sea más personalizada.
Más allá del trato directo con el usuario, la tecnología también se incorporará en el resto de la cadena de valor de las compañías de restauración colectiva para facilitar el trabajo de los empleados, desde los sistemas de trazabilidad que forman parte de los controles de seguridad alimentaria, pasando por la cadena de suministro y distribución, e incluyendo también las oficinas y almacenes. la innovación tecnológica será un gran aliado del sector a medida que efectúa su evolución hacia un futuro más saludable, sostenible y digital.
Fuente: GastroLab