Sanlúcar de Barrameda, Capital Española de la Gastronomía 2022, presentaba sus productos insignia en el Salón Gourmets celebrado en Madrid esta semana.
En la ciudad gaditana, donde el Guadalquivir se hermana con el Atlántico y los caballos galopan sobre la arena de la playa, se esconden algunos de los mejores productos de la gastronomía andaluza. Eso es lo que han querido poner en valor el periodista gastronómico Pepe Ferrer y el cocinero sanluqueño José Calleja, chef del restaurante Surtopía, en Madrid. La unión del vino, el marisco, el pescado y las verduras hacen de este lugar un verdadero tesoro gastronómico.
Durante la presentación de "Sanlúcar de Barrameda, el mundo, vuelta y vuelta", en el stand de Andalucía en Salón Gourmets 2022, pudimos conocer más en profundidad las características del vino sanluqueño, donde destaca la polivalente manzanilla, y las variedades de la gastronomía local, que aúnan el mar y la sierra y que encandilan a todo el que pasa por allí.
Algunas de las propuestas que presentó el chef José Calleja, y que también se pueden encontrar en su restaurante Surtopía, una suerte de embajada sanluqueña en Madrid, fueron la clásica tortillita de camarones, unas tradicionales patatas aliñadas, pero dándoles un toque más vanguardista al presentarlas dentro de un "maki", un montadito de la característica "carne mechá" sanluqueña, macerada en amontillado, o un mejillón escabechado con vino de Jerez, acompañado de patata y puré de zanahoria.
Por su parte, Pepe Ferrer hizo gala de su profundo conocimiento sobre los vinos de la región, en una cata donde fue posible conocer los distintos matices y sabores que se derivan de la manzanilla, dependiendo del tiempo de crianza. Lo que es característico de estos vinos realizados con variedad de uva palomino es que esta crianza se realiza bajo velo de flor, que es una capa de levadura que se forma sobre el vino, dentro de las botas, lo que la protege de la acción del aire.
Entre las opciones de manzanilla que destacó el periodista gastronómico y Embajador Oficial de los Vinos de Jerez podemos encontrar la manzanilla Solear, de la Bodega Barbadillo y con unos 7 u 8 años de crianza, que destaca por ser un vino fresco y seco con un sabor muy persistente. Característica por su mayor tiempo de crianza, encontramos también la manzanilla Pastora, que ronda los 9 años de crianza. Este se trata de un vino suave pero con mucho sabor, con aromas salinos que persisten en el paladar. El último de los vinos que pudimos catar fue el Príncipe de Barbadillo, un vino amontillado con hasta 15 años de crianza y que destaca por un gran equilibrio en el paladar, con notas salinas y de avellanas tostadas.
El inmejorable enclave de Sanlúcar de Barrameda, una bellísima ciudad a orillas del Atlántico, y rodeada por marismas y por el Parque Nacional de Doñana, hace que se presente como un destino turístico fantástico dentro del panorama nacional, y que hace de la gastronomía y el vino un paraje aún más completo si cabe.