Los datos sobre el desperdicio alimentario en Europa —tan solo en España desperdiciamos alrededor de 7,7 millones de toneladas de alimentos anualmente— son muy preocupantes en cualquier época del año pero, especialmente, en primavera y verano, unos meses en los que, según el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA), se tiran un total de 260 millones de kilos de frutas y verduras, 13 millones de kilos más que en el resto del año.
Y es que, a pesar de ser alimentos muy adecuados para la temporada más calurosa del año por su gran cantidad de nutrientes y agua, y porque con ellos se pueden preparar recetas muy frescas para sobrellevar el calor, son también productos más sensibles a las altas temperaturas y si no se conservan bien se estropean mucho más rápido.
De acuerdo con Oriol Reull, director de Too Good To Go en España, app que lucha contra el desperdicio de alimentos, esta leve reducción del desperdicio demuestra "que cada vez la sociedad está más concienciada y que vamos por el buen camino, pero aún las cifras siguen siendo muy elevadas. Por ello hay que seguir insistiendo en el cambio de hábitos en casa, en la importancia de la planificación a la hora de ir a hacer la compra y de la correcta conservación de los alimentos, pero sobre todo en la creatividad en la cocina pues hay muchas formas de aprovechar estos productos aún estando ya muy maduros." Además, el responsable de la plataforma advierte que "reducir el desperdicio es positivo para todos, se ahorra dinero y además aprovechamos mejor los recursos contribuyendo así a cuidar el planeta evitando el impacto medioambiental que supone el desperdicio alimentario."
A continuación exponemos algunos consejos sencillos que brinda Too Good To Go con los que contribuir a reducir el desperdicio de frutas y verduras en verano.
Desperdicio alimentario: Cómo reducirlo en verano
Planificar la compra
Antes de comprar es muy recomendable echar un vistazo a lo que tenemos en la despensa y en la nevera y elaborar una lista con lo que necesitamos. De esta manera evitaremos comprar de más o cosas que ya tengamos en casa.
Comprar productos locales y de temporada
Con este tipo de productos, que se encuentran en su momento óptimo de consumo y, por tanto, se conservan mejor, estaremos ahorrando dinero y, además, contribuyendo con la economía local comprando a comercios y productores de proximidad.
El frigorífico siempre ayuda
Conservar lo más frescas posible las frutas y verduras que tenemos en casa es clave para evitar que se estropeen antes de tiempo. En esta tarea el frigorífico es nuestro mejor aliado, siempre que recordemos tenerlo a una temperatura media de 5 ºC y guardar toda la fruta y verdura en los cajones inferiores, normalmente la zona más fría de la nevera que ayuda a conservar mejor estos alimentos.
El congelador para conservar durante más tiempo
Prácticamente se puede congelar toda la fruta y verdura. Un consejo muy práctico antes de congelar es cortarla, dividirla en raciones y guardarla en recipientes de congelación, De esta manera no tendremos que descongelarlo todo de golpe, sino que podremos ir sacando según lo necesitemos.
Creatividad en la cocina
La fruta y verdura madura sigue siendo igual de sabrosa que siempre y hay muchas formas de aprovecharla antes de que se siga estropeando. Tan solo hay que echarle imaginación en la cocina, haciendo desde un buen gazpacho o salmorejo con los tomates a unas cremas frías con la verdura más madura, hasta batidos, helados o postres con esa fruta que ya ha madurado un poco de más.
Excedentes a precio reducido
Y, finalmente, desde Too Good To Go recuerdan que en su app figuran miles de supermercados y fruterías venden su excedente de frutas y verduras, entre otros productos, a precio reducido. Salvando packs con ese excedente a través de la aplicación se contribuye también a evitar el desperdicio en las tiendas.
Fuente: Too Good To Go