Aunque para muchos no sea más que una fruta exótica tanto por su tamaño como aspecto, otros ya hablan de la jackfruit o yaca como el alimento del futuro. Considerada la nueva carne vegetal, este fruto oriundo de la India ha ido conquistando las mesas de todo el mundo como una alternativa nutritiva y versátil.
Ella reúne sostenibilidad, bajo impacto ambiental, buen sabor y ricas propiedades. No en vano es un recurso gastronómico prometedor que ya se emplea en toda clase de elaboraciones, desde tacos y baos hasta guisos y postres.
El superalimento gigante del Trópico
El jackfruit ostenta el título de la fruta más grande del mundo, alcanzando hasta 50 kilos de peso y 90 centímetros de longitud. Su apariencia, entre el verde y amarillo, es rugosa y espinosa, sin embargo, su interior oculta una pulpa fibrosa de múltiples beneficios a la salud. De ahí que haya desplazado a alternativas populares de carne vegana como el tofu o la soja.
Suele cambiar de textura y sabor según su madurez: cuando está verde, su carne es neutra, perfecta para replicar platillos como el pulled pork o estofados vegetarianos; mientras que madura, se vuelve dulce, combinando notas de plátano, mango y piña, ideal para postres y helados.
Aunque su presencia en Europa y América es limitada, tampoco es imposible encontrarla. Lo más común es en conserva en tiendas asiáticas o especializadas, y en naciones como Sri Lanka, Bangladesh y Tailandia es un básico de la dieta.
Los beneficios de comer jackfruit
Entre las virtudes principales de la yaca se halla su composición: rica en vitamina C y antioxidantes, lo cual ayuda a fortalecer el sistema inmunológico; alta en fibra, cuestión que la hace ideal para mejorar la digestión, curar úlceras, y prevenir el estreñimiento y a la vez baja en calorías y grasas.
Pero ahí no acaba. La fruta es una fuente de minerales como el potasio, por lo cual contribuye a mantener una presión arterial saludable y a reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares y a dotar de una energía sin igual al organismo. Asimismo, la presencia de calcio y fósforo participa en el fortalecimiento de los huesos y la prevención de la osteoporosis.
No obstante, aun cuando a más de uno su textura desmenuzada le parece una excelente opción para sustituir carnes en platos vegetarianos, es importante aclarar que el jackfruit no es un reemplazo nutricional de la carne. Si bien contiene algo de proteína (2 g por cada 100 g cuando está verde), no se acerca a la cantidad que ofrecen las legumbres o la carne real. Así que la idea es hacerla solo una parte de dieta equilibrada como complemento de otras fuentes de proteínas.