La noche del 23 de junio supone un momento mágico para millones de personas que se reúnen alrededor de hogueras para celebrar el inicio del verano en el hemisferio norte. Una fiesta de origen pagano en la que se realizan una serie de ritos, como el salto de las hogueras o la quema de papeles con aspectos negativos de la vida que se quieren dejar atrás, de forma que se atraen nuevas oportunidades. Estas celebraciones van unidas a una tradición gastronómica que varía alrededor de la geografía española.
Uno de los platos más típicos de esta noche, tanto en el norte como el sur de España, son las sardinas asadas, conocidas como espetos en Málaga y sardiñadas en La Coruña. Los gallegos acostumbran a acompañar las sardinas en esta ‘Noite Meiga’ con mejillones asados en la hoguera acompañados con vino tinto o las clásicas queimadas – bebida compuesta principalmente por aguardiente de orujo, granos de café y cáscara de limón o naranja, que se quema para rebajar el nivel de alcohol –.
Por su parte, los andaluces optan por acompañar los espetos con platos de jamón y un vaso de sangría; sin olvidar la parte dulce de la celebración, con la tradicional Cazuela de San Juan (un pastel de calabaza típico de Granada) y los pericones originarios de Navas de San Juan (Jaén).
En la costa mediterránea, en Cataluña y Comunidad Valenciana, se suelen consumir las tradicionales cocasde diferentes ingredientes, tanto saladas, con diferentes hierbas, quesos…, como dulces, con crema pastelera, mazapanes… En la provincia de Alicante, por ejemplo, es común comer la coca con atún, llamada coca amb tonyina, una receta fácil y económica.
También en el Mediterráneo, en las Islas Baleares, se prepara un guiso de albóndigas de ternera con salsa de tomate y pimientos. En Mallorca es típico acabar la cena de la noche de San Juan con un menjar blanc, una dulce crema de leche con canela y ralladura de limón. Asimismo, en las islas de Ibiza y Formentera es costumbre comer los macarrons de Sant Joan, un postre similar al arroz con leche, en el que sustituyen el arroz por una pasta rizada típica de la zona.
La gastronomía vasca no se queda atrás, y para esta noche mágica los grupos de amigos y familias enteras se juntan para beber sidra y comer raciones de bacalao o de chorizo a la sidra. Otra bebida típica de esta festividad en el País Vasco es el zurracapote, vino tinto mezclado con melocotón y limón partido.
Una tradición extendida por Iberoamérica
Más allá de las fronteras españolas, en otros países de Iberoamérica también celebran esta fecha con platos típicos que consumen durante la noche de San Juan. En Perú elaboran su típico juane, una bola de arroz con huevo, aceitunas y pollo, que se envuelve en hojas de bijao o plátano. Por su parte, en Bolivia tienen tradición de cenar perritos calientes y buñuelos, acompañados de una bebida caliente y dulce elaborada con maíz rojo – apí – o un aguardiente de uva con canela y leche – sucumbé –.