Romain Fornell, chef francés afincado en tierras catalanas y copropietario del Restaurante Caelis de Barcelona. Dirige 14 negocios del sector hostelero y disfruta de una estrella Michelin.
"Dirigimos 14 establecimientos en la Ciudad Condal. La línea común con mi socio, Óscar Manresa, es cocina de Barcelona con un toque francés. Esta es la particularidad de nuestro negocio"
Para Romain, ¿qué ha representado Jöel Robuchon?
Ha sido uno de los grandes pilares de la cocina francesa, y sobre todo, es el primero que enseñó al mundo a Ferran Adrià. También, ha sido el que ha abierto la puerta a todos lo chefs españoles para difundir la cocina española mundialmente.
¿Cuántos restaurantes regenta usted y qué estilo tiene de cocinar?
Dirigimos 14 restaurantes en Barcelona. La línea común con mi socio, Óscar Manresa, es cocina de Barcelona con un toque francés. Esta es la particularidad de nuestros restaurantes. Siempre hemos jugado esta carta, y tenemos todas las gamas de estos. Desde con una estrella Michelin hasta un bar de ostras, braseire, cafés...Tenemos todas las gamas que permiten jugar todo el día y todos los días del año.
¿Cómo se gestiona esto?
Crear sitio es fácil. También cocinar lo es. Lo más difícil es hacer equipo. Ahora tenemos unas 200 personas trabajando.
Incluso, usted tiene tiempo para asesorar el Hotel de la Gavina S'Agaró.
Llevamos varios años trabajando con el único hotel cinco estrellas de la Costa Brava, uno de los establecimientos más emblemáticos del mundo. Es pura magia. Es como un paraíso, situado a una hora de Barcelona. Y, esto, es otra unión entre Francia y España. Tenemos muchísima clientela francesa. Es un hotel que hace guiños a la sociedad francesa.
Ciudad cosmopolita
¿A qué fue debido que usted recalara en Barcelona?
Yo quería afincarme en una ciudad que fuera cosmopolita, y sobre todo poder hacer crecer una familia dentro de una ciudad a tamaño humano, con alegría diaria. Y, esto, me lo ha dado Barcelona. Me afinqué en esta ciudad en la cual me siento muy feliz y muy cómodo, a la vez.
Además, uno de los restaurantes que ostenta está galardonado con una estrella en la guía Michelin ¿El Caelis?
Exactamente. El Caelis es un poco el buque insignia de todos nuestros restaurantes. Es el que me ha dado a conocer. Yo tuve una estrella en Francia y ahora una en Barcelona. Caelis es un sitio maravilloso. Está situado dentro de un hotel. Es un restaurante que puedes comer dentro de la cocina. Y, esto, es maravilloso.
¿Es toda una experiencia sentarse en una mesa de Caelis?
Procuramos que sea una experiencia. Intentamos que sea un momento de placer; es lo que buscamos en el día a día. Esto es lo que hace la magia de un restaurante como Caelis.
¿Cuál es el penúltimo proyecto que tiene en cartera Romain Fornell?
En 2017 abrimos la Casa Leopoldo, que era un referente de la gastronomía hace 35 años en Barcelona, y que venía a ser un sitio muerto. Nosotros lo hemos intentado relanzarlo. Este factor ha tenido una muy buena repercusión a nivel de clientela. Con Óscar Manresa es lo que buscamos. No queremos crear sitios nuevos, pero sí coger historia y actualizarla.
Negocios
Dirigir tantos negocios ¿no llega a crear un gran estrés profesional?
R,- No. Para nada. Es un modus vivendi. He decidido vivir de esta forma y al final no crea ningún estrés, porque siempre estamos pendientes de nuestros anfitriones. Siempre con el punto de mira en ir mejorando, y trabajando con gusto. No voy a decir duro, porque no sé que es trabajar duro, pero trabajar a gusto, es lo que intentamos hacer.
Le voy a hacer una pregunta un tanto comprometida ¿España está en estos momentos mucho más metida en la vanguardia de la gastronomía internacional, que Francia?
R,- Es difícil decir si es más o menos. No lo sé. Yo no soy nadie para valorarlo. Estamos en dos países con muchas ganas, con muchas técnicas, con genios por las dos partes. Yo no soy de "listas", ni de podium's, ni de todo esto. En los dos lados de los Pirineos, comemos maravillosamente bien. Nunca lo hemos hecho también como ahora. Creo que lo que vendrá será fantástico. No se puede definir esto. No tengo criterio ni creo que nadie lo tenga.