De estos sistemas de ventilación encontraremos una variedad muy considerable dentro del mercado. De diferentes tamaños, estilos, pero sobre todo de diferentes funcionamientos. Entre ellos nos encontramos con:
De movimiento hacia arriba
En general este tipo de sistemas de ventilación son una campana que absorbe el aire que sale de la estufa, llevándolo hacia arriba, pasando por entre un filtro y un ducto que lo lleva hacia el exterior, fuera de nuestra cocina. En este caso debemos procurar que nuestra cocina tenga una salida hacia el exterior.
De movimientos hacia abajo
El funcionamiento de estos modelos lleva todo el aire de la estufa hacia el suelo de la cocina, sitio donde se encuentra una rejilla que lleva hacia un ducto que saca el aire hacia el exterior de nuestra cocina. Estos tipos de sistemas son muy utilizados en apartamentos.
Sin ducto
Otros que sin duda son idóneos para apartamentos son aquellos que cuentan con campanas sin ducto que filtran el humo y varios olores. Sin embargo, este tipo de sistemas dejan la mayoría de la polución en el aire de la cocina, razón por lo que si optamos por este tipo lo mejor es que nuestra cocina funcione con gas.
En cualquiera de los casos, lo aconsejable es que la campana se extienda hasta cubrir el mismo espacio que nuestra estufa, con la suficiente potencia como para contener los vapores que produce la cocina. Además, al momento de instalar la cocina la recomendación es no hacerlo más alto de ochenta centímetros sobre la estufa. Fuente: Okdecoracion
La moda de la cocina americana
La cocina americana (o abierta) es cada vez más común en las casas, pues una cocina integrada en un pequeño espacio es una opción inmejorable. Además, resulta una idea muy acertada en los casos en los que se trata de una zona pequeña y/o sin apenas luz, abrir la cocina al resto de la casa le dará luminosidad y hará que parezca más grande.
Las opciones para hacer cocina americana son muy variadas, a veces la cocina carece de cualquier límite con el salón, pero lo más habitual es que la cocina americana se disponga en forma de U, y que una parte de la misma funcione a modo de barra, separando la zona de trabajo del resto de la estancia.
Otra de las principales ventajas de una cocina abierta es que la socialización es más fácil. Mientras uno trabaja en la cocina, puede seguir en contacto con el resto de la familia o los invitados. La contra, esta clara, hay que tener la cocina siempre limpia y los platos guardados, porque si no el efecto es terrible.
Una buena idea para aprovechar el espacio es doblar la superficie de la barra para tener en el mismo espacio superficie de trabajo y mesa. Aquí lo vemos en versión cuadrada.
Entre sus principales variantes están:
La versión redonda, más original.
La cocina americana donde la mesada se puede utilizar como almacenaje en la parte del salón.
Aquellas en que la cocina tiene su propio espacio, pero no se coloca tabique para que pueda utilizar la luz proveniente del salón.
Otra opción sería colocar unas puertas correderas de cristal, para poder elegir la cocina tradicional en el momento de freír pescado, por ejemplo.
Las que se utiliza un tabique que marca cierta separación, pero se deja el espacio abierto por cuestiones prácticas: ganar luminosidad.
Cuando la cocina es pequeña, elegir una abierta produce la impresión de que hay más espacio y agobia menos trabajar en ella.
