Vinos italianos y Habanos protagonizaron la tercera jornada de la Semana de la Cocina Italiana en Cuba, que este miércoles cerraba su tercer día encuentros, cursos, rondas de negocios e intercambios entre chefs y sommeliers de ambas naciones.
En el Bar Constante del Hotel Kempinsky en La Habana se dieron cita el embajador de Italia en Cuba, Sr. Roberto Vellano y su esposa; el vice-embajador Sr. Giulio Del Federico, y la directora de la Agencia para el Comercio Exterior (ICE), Simona Autuori con chefs, sommeliers, expertos, conocedores y amantes del buen vino y de ese aroma inigualable de un buen Habano, para compartir y ser testigos de un maridaje sin igual.
Durante la velada Excelencias Gourmet conversó con el sommelier italiano Franco Agliodo, para quien el maridaje de un vino italiano como el Barbaresco, y un Habano H. Upman cepo 50 resultó ser una experiencia inesperada.
"Este es un vino muy importante, un vino Piamontés, el Barbaresco. Es un vino que va maridado con platos importantes, bien elaborados. Con este Habano tiene una combinación de sabores, que te deja en boca una sensación de regaliz, ese gusto pleno.
"En este caso el Habano atenúa el sabor del vino y el vino que complementa el Habano, algo que no habría imaginado nunca; pues cuando pienso en un Habano pienso en vinos fortificados, o en el ron, en los licores, pero en este caso es una experiencia completamente nueva que en realidad no me esperaba."
Y es que, durante su conferencia del pasado lunes, Agliodo que no es fumador, prometió encender y degustar un Habano, armonizándolo con un buen vino de su tierra.
No podía faltar, como cierre de esta nota, la opinión experta del presidente de la Asociación de Sommeliers de Cuba, Jesús Machín.
"Es una oportunidad muy importante para los profesionales del servicio en nuestro país poder hacer alianzas con vinos de diferentes regiones de Italia y diferentes tipologías, y nuestro Habano rey: un Magnum 50, una joya de la marca H. Upman que se lanzó como parte del portafolio de Habanos S.A. en su parte standard en 2008 y previamente en 2005 había sido lanzado como una edición limitada.
"Un Habano sin par, un 50 de cepo por 160 mm de largo, para una hora de completa entrega, sobre todo en esta velada que tuvo la oportunidad de empezar con unos vinos rosados y unos proseccos del Veneto, y que prosiguió con expresiones de esa gran región italiana que es Piamonte con sus Barberas y sus Barbarescos que ha hecho de esta, una velada fenomenal para la mayoría de los profesionales, con la expresión suave media de este Habano.
"Y finalmente el último tercio lo estamos acompañando con un Moscato, un licor de Amaro y Grapa, una Grapa sin añejar por barrica que ha dado también una sintonía muy interesante.
"Pero sobre todo yo diría que los protagónicos han sido el Barolo y el Barbaresco. Son dos vinos de complejidad que han resultado, con sus matices expresivos y, junto a nuestro Magnum 50 una sintonía, un balance, un equilibrio y sobre todo mucho placer.
"Que sirva esto como instrumento para recomendar a los clientes que nos visiten, cuando tengamos estos productos a mano. Ha sido realmente, muy provechosa esta noche. Gracias".
El Bar Constante del Hotel Kempisnky en La Habana, guardará por siempre el secreto de un exquisito maridaje entre vinos italianos y Habanos.
