La Dieta Mediterránea hace referencia a una serie de alimentos, hábitos y costumbres gastronómicas que son propias de la cuenca del Mediterráneo y que forman parte de nuestra identidad cultural. Este año está de celebración pues cumple el décimo aniversario de su declaración como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la Unesco.
Es una forma de alimentación saludable y sostenible que surge de los recursos de nuestro entorno (del trigo, del olivo, de la vid) y que se ha conservado hasta nuestros días. Una dieta rica, variada y especialmente satisfactoria.
Le puede interesar: La Dieta Mediterránea celebra su día
Dieta Mediterránea: Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad
El 16 de noviembre de 2010, la Unesco (Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura) aprobó la solicitud para que la Dieta Mediterránea entrara en la Lista Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad, una propuesta presentada conjuntamente por España, Grecia, Italia y Marruecos.
La iniciativa surgió de España, a través del Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino, con la especial colaboración de la Fundación Dieta Mediterránea y el apoyo de la Real Academia de Gastronomía.
En 2013 la Dieta Mediterránea entraba, oficialmente, a esta Lista de la Unesco. De esta manera, se reconoce su importancia a nivel internacional y se establecen medidas para su salvaguarda.
Beneficios de la Dieta Mediterránea
Como reconoce la Unesco, la Dieta Mediterránea es un "conjunto de habilidades, conocimientos, rituales, símbolos y tradiciones relacionados con los cultivos y cosechas agrícolas, la pesca y la cría de animales, y también con la forma de conservar, transformar, cocinar, compartir y consumir los alimentos".
La Dieta Mediterránea, basada en el predominio de alimentos saludables como las frutas y verduras, los cereales, los pescados o el aceite de oliva, tiene numerosos beneficios para la salud.
Recomendamos: Dieta Mediterránea, nutrición y sistema inmunitario
Los alimentos y las costumbres que la componen están determinados por el clima y la región, los productos de proximidad, los alimentos autóctonos que se generan en nuestro entorno (y la forma de producirlos) y promueve una alimentación sostenible.
Pero, además, la Dieta Mediterránea es un estilo de vida que fomenta las relaciones sociales y familiares, la forma de comer y de cocinar, la conversación y la hospitalidad.
Próximo Curso de la UAX sobre la Dieta Mediterránea
Este año, la Real Academia de Gastronomía (RAG) y la Fundación Española de la Nutrición (FEN) tienen previsto llevar a cabo acciones conjuntas para conmemorar el X Aniversario y seguir difundiendo la importancia de nuestra dieta.
Entre otras acciones, se está evaluando la posibilidad de lanzar en la Universidad Alfonso X el Sabio, en el marco de la Cátedra de Gastronomía de la RAG, un Curso Reducido dedicado a la Dieta Mediterránea.
En él se analizarán los diferentes aspectos culturales y sociales, el valor nutricional y saludable de la dieta, y cómo se integra en la cocina tradicional y en la de vanguardia.
La tapa, candidata a ser Patrimonio de la Humanidad
Al igual que la Dieta Mediterránea, las tapas también forman parte de la identidad cultural de nuestro país. Tapear o "ir de tapas" es la costumbre de juntarse varias personas para acudir a los bares a consumir bebidas, acompañadas de pequeñas raciones de comida, que hacen que la ingesta de energía sea menor y que nuestra dieta sea más variada. Las tapas no son solo el alimento en sí, sino la forma de consumirlas.
A propuesta de la Real Academia de Gastronomía, se han iniciado los trámites para solicitar a la Unesco que declare la forma de comer de las tapas, en España, Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad.
Fuente: Gastrocultura